Los cinéfilos laguneros tendrán oportunidad de ver Arráncame la Vida. (Archivo)
Nuevo Cine Mexicano es el título del ciclo con el que arranca actividades el cineclub del Teatro Alberto M. Alvarado.
Uno de los proyectos de mayor impacto y captación de público que ha trabajado a lo largo de un año y medio es el Instituto Municipal de Cultura, que empieza el año con tres importantes títulos cinematográficos: Arráncame la Vida, El Viaje de la Nonna y Morirse Está en Hebreo.
El turno de hoy es para la cinta Arráncame la Vida del director Roberto Sneider, que se estará proyectando a las 8:30 de la noche en el Alvarado.
El largometraje basado en la obra literaria de la escritora Ángeles Mastretta, detalla de manera impecable, gracias a la producción, el México de 1930. Una sociedad salpicada por fenómenos como corrupción, política, amor y violencia, entre muchos otros.
Salvador Parra fue el encargado de recrear en Puebla los escenarios de los años 30 y 40, que aprovecha muy bien el español Javier Aguirresarobe, director de fotografía de la película, que sea dicho de paso fue aprobada por la escritora de la novela.
Los protagonistas del exitoso largometraje que rompió records de taquilla son Daniel Giménez Cacho, Ana Claudia Talancón y José María de Tavira. La producción, dirección y adaptación del guión fueron realizadas por Roberto Sneider, quien presenta su segundo largometraje, depuse de Dos Crímenes, basada en la novela de Jorge Ibargüengoitia.
Entre un mundo de política, corrupción, adulterio, asesinato y amor, se desarrolla Arráncame la Vida. La historia de Andrés Asensio y Catalina Guzmán, de su relación amorosa, de las relaciones de poder entre hombres y mujeres, de los cómplices del poder....
Es la historia de una mujer que busca la libertad en el puebla de 1930. Catalina encuentra en Andrés, un hombre simpático y poderoso, una vía para salir de su pequeño mundo, de acceder a cosas más a la medida de su curiosidad y sus ganas de vivir.
La protagonista descubre muy pronto que al haber ligado su vida a la de Andrés, también está perdiendo su libertad. Y en Andrés encuentra un difícil adversario, sobre todo porque él es todo un seductor, generoso y protector. Catalina tiene que vencer antes que nada su propia fascinación por el personaje, por todo lo que le trae a su vida.
La historia se complica cuando Catalina entra al Palacio de Bellas Artes y conoce al joven director de orquesta, Carlos Vives, quien es la contraparte del hombre con quien está.
