Consumir ácido fólico y hierro durante la etapa reproductiva de las mujeres son factores que pueden prevenir un defecto en el nacimiento. (El Universal)
El 2% de los niños que nacen en el país tiene algún tipo de malformación congénita,
La cuarta parte de los niños mexicanos nace con algún tipo de defecto como bajo peso, prematurez, falta de oxígeno y malformaciones congénitas.
La asociación civil Grupo de Estudios del Nacimiento (GEN) aseguró que estas alteraciones provocan el 60% de las muertes neonatales, pero además son la principal causa de discapacidad y afectan el desarrollo físico, emocional e intelectual del niño o la niña.
Antonio López de Silanes, presidente de GEN, indicó que una proporción de esos nacimientos obedece a la genética y la herencia, pero la mayoría de esos defectos es prevenible, por lo que consideró que se debe desterrar la falsa creencia de que los niños nacen con esos males “porque Dios así lo quiso”.
Consumir ácido fólico y hierro durante la etapa reproductiva de las mujeres, prevenir la aparición y desarrollo de enfermedades como la diabetes y la hipertensión, planear los embarazos entre los 25 y 35 años de edad y visitar al médico durante la gestación son factores que pueden prevenir un defecto en el nacimiento, explicó Carlos Vargas, director médico de GEN.
Consideró que la política pública enfocada a prevenir estos defectos debe ser consistente y perdurar, pues las campañas temporales que promueven, por ejemplo, el consumo de ácido fólico tienen menos efectividad que si fueran permanentes.
Algunos defectos físicos se pueden observar desde el momento del alumbramiento como el labio y paladar hendido, pero en otros casos se suelen diagnosticar hasta la adolescencia o la juventud.
A Susana le detectaron el síndrome de Ehlers-Danlos a los 23 años de edad, pero desde los 6 años padece luxaciones constantes de sus rótulas, lo que le produce dolores insoportables. Los especialistas que consultó le informaron que su mal lo comenzó a desarrollar desde el nacimiento.
En México, los datos oficiales señalan que al año nacen alrededor de 2 millones 100 mil niños. De ese total, el 8% es prematuro; el 10% nace con bajo peso; el 5% con falta de oxígeno (hipofixia) y el 2% con algún tipo de malformación congénita.
Hace 30 años, un grupo de especialistas pertenecientes a GEN se unieron para detectar y prevenir defectos al nacimiento entre la población mexicana debido a la elevada incidencia de casos y a la prevalencia de cuestiones culturales que impiden a la mujer someterse a revisiones médicas antes, durante y después de un embarazo.
Antonio López de Silanes explicó que desde entonces, GEN comenzó a capacitar a médicos y enfermeras, instaló el Centro de Investigación Materno Infantil -donde se atienden nacimientos- y comenzó a influir en la creación de políticas públicas como el programa “Arranque parejo en la vida” que comenzó a operar en la Administración del ex presidente Vicente Fox para reducir los índices de mortalidad materna e infantil.
Indicó que ahora se promoverá la creación de un instituto de investigación donde se genere conocimiento específico sobre dichos defectos.
El especialista Carlos Vargas aseguró que en el Centro de Investigación Materno Infantil (Cimi-GEN) se redujo la incidencia de defectos al nacimiento debido a la detección temprana y prevención de factores de riesgo entre las madres.
Detalló que a nivel nacional mueren al año 5 mujeres por cada 100 mil nacimientos y entre 15 y 20 niños por cada mil nacidos vivos. En tanto, en este centro esa misma prevalencia es de 0.7 muertes maternas y entre 5 y 6 niños que fallecen.
Karla Plata, de 18 años de edad, es una de las pacientes que se atiende en dicho centro, donde el pasado 19 de noviembre tuvo a su primer hijo. Es madre soltera y asegura que debido a su edad le informaron desde el inicio de su embarazo que éste era de riesgo. Sin embargo, para evitar complicaciones comenzó a tomar ácido fólico y hierro, evitar el estrés y asistir a consultas regulares para monitorear el curso de su embarazo y tener asistencia nutricional. Ella atribuye a esos cuidados el hecho de que su bebé haya nacido a término, con buen peso y sano.
Los riesgos
Los defectos al nacimiento se pueden relacionar con:
La edad de los padres (un embarazo antes de los 20 y después de los 35 años).
Alimentación materna inadecuada.
Consumo de alcohol, tabaco y drogas.
Infecciones de la madre.
Hipertensión y diabetes en el embarazo.
Parto prematuro.
Retraso del crecimiento.
Para prevenir
Las recomendaciones para evitar defectos al nacimiento son:
Que toda mujer de entre 13 y 45 años de edad consuma a diario una tableta de 0.4 miligramos
de ácido fólico (vitamina que mejora la nutrición y previene los defectos de cerebro, cara o columna vertebral del bebé).
Acudir a control médico cada mes.
No tomar fármacos sin recomendación médica.
No fumar ni consumir drogas o alcohol.
Planear sus embarazos entre los 25 y 35 años de edad.
Una vez nacido el bebé se le debe practicar el tamiz neonatal para detectar de manera temprana
posibles defectos y aplicarle las vacunas que correspondan.
