La gente debe saber que siempre se puede comer bien y ahorrar, esto con una alimentación abundante en frutas y verduras como fuentes saludables de proteínas.
Es momento de aprender a cuidar el bolsillo, pero sin que afecte la alimentación, que es base del bienestar.
El refrán dice que “primero la panza”, es decir comer bien para vivir mejor, y en el momento en que la crisis económica toca a la puerta de México hay que recordar que cuidar la salud es una buena inversión.
Por ello hay que escuchar y leer los consejos para mantener una dieta sana, sabrosa y barata.
Los especialistas en sana nutrición de Herbalife dicen que es hora de tener en cuenta los gastos de todo tipo a detalle, por lo que los consumidores deben considerar algunas recomendaciones que les permitirán mantener una nutrición saludable con un bajo presupuesto.
De la huerta natural
De acuerdo con los expertos, existe una amplia variedad de comida de costo relativamente bajo, pero no toda cumple con los requerimientos de nutrición como son los almidones, azúcares y grasas.
La gente debe saber que siempre se puede comer bien y ahorrar, esto con una alimentación abundante en frutas y verduras como fuentes saludables de proteínas.
La experiencia acumulada por los especialistas en nutrición les ha permitido elaborar una lista de consejos para cumplir el objetivo de lograr una alimentación sana y barata:
• Coma estilo vegetariano una vez a la semana. Ese día es para combinar granos, como arroz o maíz, con frijoles, garbanzos o lentejas es una manera económica de incluir proteínas de buena calidad.
• Utilice condimentos para aumentar el sabor en los platos, como lentejas con curry acompañadas de arroz integral o sopa picante de frijoles negros con pan o tortillas de maíz. Agregue el toque final con una ensalada o alguna fruta de temporada y tendrá una comida sumamente nutritiva.
• Evite comprar comida rápida. Una malteada de proteínas hecha con Fórmula 1 Herbalife mezclado con leche de soya y fruta fresca o congelada ofrece una alimentación más completa a un costo menor, al tiempo que brinda comodidad y valor nutricional.
• Congele los productos de estación. Las frutas y verduras heladas tienen el mismo valor nutricional y, en algunos casos, este método puede conservar mayores propiedades, debido a que las comidas son procesadas casi de inmediato, después de la cosecha. Adquiera en el mercado o súper las frutas y verduras de temporada y congélelas.
• Las comidas congeladas son prácticas, pero pueden ser costosas. Aun cuando llegan a representar una buena opción éstas no son un plato completo a menos que se agregue una ensalada o vegetales o fruta, lo que finalmente aumenta el costo de la alimentación.
• Cocine grandes cantidades de comidas como sopas, platos fuertes o pastas y congele en porciones individuales para llevar como almuerzo al trabajo.
Con un poco de planeación y una selección detallada de los alimentos se puede cuidar del presupuesto y mantener una nutrición sana y equilibrada.
Nadie debe dejar pasar por alto que la imaginación en la cocina es fuente de sabor. Las carnes son elementos indispensables en la nutrición, pero hay que pensar en que algunos cortes o piezas son más baratos, quizá es momento de poner éstos en la cazuela.
