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Crean productos de cartón para hogares y oficinas

A 50 años de iniciar la construcción de una industria con cimientos de celulosa, Pablo Elizarrarás, director general de Todo de Cartón, continúa con la expansión de una empresa cuyo objetivo inicial era acabar con el peregrinar del archivo muerto.

A 50 años de iniciar la construcción de una industria con cimientos de celulosa, Pablo Elizarrarás, director general de Todo de Cartón, continúa con la expansión de una empresa cuyo objetivo inicial era acabar con el peregrinar del archivo muerto.

El Universal

A 50 años de iniciar la construcción de una industria con cimientos de celulosa, Pablo Elizarrarás, director general de Todo de Cartón, continúa con la expansión de una empresa cuyo objetivo inicial era acabar con el peregrinar del archivo muerto.

La firma se mantiene con la idea de crecer y modernizarse para cubrir las expectativas de la gente al abrir su catálogo no sólo a cajas de almacenamiento, sino a necesidades tanto de oficinas como de hogares. Su finalidad es brindar productos de menor costo.

El empresario comenta que, aunque el negocio sigue creciendo, la producción se ve mermada ya que el papel se encareció. “La materia prima mantiene un aumento constante, lo que nos afecta porque incrementa costos, aunque tratamos de no subir los precios”.

Por ejemplo, el incremento anual de la celulosa es 10%; para la producción que genera la empresa (12 mil toneladas anuales) es una suma importante. Sin embargo, Todo de Cartón mantiene un crecimiento anual de 8% en los últimos cinco años, lo que le permite llegar a diversas ciudades de la República.

“Somos una empresa 100% mexicana, que gracias al sistema de franquicias llega a sitios impensables”.

Más de 120 artículos impresos en alta definición, de cartón corrugado, microcorrugado y cartón rígido forrado principalmente, dan forma a todo tipo de diseños que se diversifican en líneas para archivo y oficina, hogar, educativa, envíos, regalos, envase y embalaje.

Sus principales clientes son dependencias gubernamentales y tiendas de autoservicios, pero un nicho importante son las ventas directas a particulares, que destinan las piezas para archiveros, cajoneras para el cuarto de los hijos, entre otras. Cada una de las 41 tiendas existentes debe generar entre 15 y 25 mil dólares mensuales.

“Esperamos llegar a 120 puntos de venta a nivel nacional y próximamente abriremos la primer franquicia en Guatemala para seguir en Honduras y Costa Rica, mientras que en Sudamérica, en 2009, esperamos llegar al mercado de Venezuela o Colombia”, manifiesta Elizarrarás.

Como todas las grandes ideas que nacen de algo circunstancial, Elizarrarás relata que esta no fue la excepción y le sucedió a su padre, Alfonso Elizarrarás, el fundador de la empresa, quien trabajaba en la industria del cartón.

“Un amigo suyo le pedía con frecuencia cajas de cierto tamaño para guardar documentos fiscales por 10 años, y tras indagar que todos tenían la obligación de conservar esos comprobantes, se dio cuenta de que nadie contaba con un lugar específico para guardarlos”. Así empezó a trabajar en un diseño que tuviera esas medidas y ciertas características. El resultado: el primer prototipo de la caja para archivo en el país y el registro de la patente del producto; la marca: Archivo Muerto.

Al poco tiempo empezó a producir artículos de cartón que tuvieran características muy específicas para organización y archivo. En 1975 conformó lo que hoy se conoce como Todo de Cartón y siguió creciendo en modelos y diseños. “Esa marca registrada es nuestra y en la actualidad se usa como un genérico de forma coloquial, aunque la definición correcta es archivo de concentración para ese tipo de documentación que está en desuso”.

Al poco tiempo empezó a producir artículos de cartón con características muy específicas para organización y archivo. En 1975 creó Todo de Cartón y siguió creciendo en modelos y diseños. A principios de los 80, la gente acudía al local que se ubicaba en la colonia Portales, y al ver que también compraban para uso casero, decidió poner una tienda para venta al público; en aquel entonces se cubría la demanda en toda la República con 20 distribuidores, además de ventas a gobierno.

El director general relata que en el 2000 adoptaron el concepto de franquicia y tienen 41 establecimientos, además de que continúa con el sistema de distribución. “Se abren aproximadamente seis tiendas por año y tenemos planes de duplicar esa cifra por año en el Distrito Federal, Monterrey, Guadalajara, León, Querétaro, Mérida y Veracruz”.

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