Reportajes

Fantasmas y leyendas ‘habitan’ la Comarca Lagunera

Muchas son las historias de fantasmas que se desarrollan en el interior del Panteón Municipal. (Fotografías de Ramón Sotomayor)

Muchas son las historias de fantasmas que se desarrollan en el interior del Panteón Municipal. (Fotografías de Ramón Sotomayor)

GUADALUPE MIRANDA

Historias como la de ‘La Cubana’ de la Alianza o la de la mujer del kilómetro 1140 han pasado de generación en generación, asustando a unos o despertando incredulidad en otros. Son leyendas de fantasmas que se oyen en los barrios antiguos de la región.

Es medianoche. Entre la penumbra y por las calles de la Alianza, aparece la figura de una mujer que viste de negro pidiendo un “aventón” a los automovilistas que por este punto circulan para luego esfumarse ante la mirada atónita de su amigo casual al llegar a su destino... el Panteón Municipal.

Esta y otras escalofriantes historias, algunas basadas en hechos reales y otras más sin origen preciso, han pasado de generación en generación en la Comarca Lagunera, unas despertando temor y otras incredulidad. Lo cierto es que estos relatos siguen vigentes a pesar de los años.

Algunas de estas historias están plasmadas en el libro “Habla el Desierto; Leyendas de La Laguna”, que recopila los relatos del Primer Concurso Regional de Leyendas editado por El Siglo de Torreón, y otras más contadas por los propios protagonistas de las tenebrosas experiencias.

La historia se desarrolla en el año de 1906. Una despiadada enfermedad llamada “la viruela negra” atacaba en todo el país. Los enfermos, según se cuenta, eran desahuciados y debido a la inminencia de su muerte, eran enterrados vivos, para evitar su propagación.

Una mujer, apodada por su origen como “La Cubana”, encantaba a todos aquellos hombres con su belleza, cada vez que la veían en un conocido burdel de la zona Alianza de Torreón.

La enfermedad, la atacó. Ante el temor al contagio, los clientes dejaron de asistir, situación que molestó a la dueña del lugar, por lo que optó por sepultarla viva. Este suceso no pasó inadvertido. Pronto toda la ciudad comentaba el caso, ya que “La Cubana” no era ninguna desconocida.

El tiempo pasó y el recuerdo de la hermosa mujer se iba borrando poco a poco. Pero una noche, según se cuenta, a las afueras de la una cantina llamada “La Feria”, justo donde las conocidas calandrias esperaban a sus clientes, una mujer vestida de negro con el rostro cubierto subió a una de ellas, solicitando la llevaran al Panteón Municipal número I, ubicado en la colonia Nueva Rosita.

El chofer, temeroso de que algo pudiera pasarle a la dama en aquel lugar, se ofreció a esperarla para su regreso. “No espere... aquí vivo”, dijo ella, cuenta la leyenda. Creyendo que era una broma insistió en esperarla. “Aquí vivo”, dijo la mujer, “¿qué acaso no me conoces?”, le preguntó; el chofer lo negó.

La dama levantó lentamente el velo negro que le cubría el rostro y el cochero, al verla, quedó atónito reconociendo el rostro de “La Cubana”. El hombre se desmayó quedando inconsciente durante algunas horas. El panteonero al ver las luces de la calandria salió y lo vio. A la mañana siguiente, el hombre le contó todo lo sucedido al panteonero, quien no daba crédito a lo sucedido, hasta que le mostró el billete con el que la misteriosa y bella mujer le había pagado por sus servicios.

La Cubana: Leyenda lagunera de 1906 que sigue causando asombro en el Viejo Torreón. (Video de El Siglo de Torreón)

LA LEYENDA DEL 1140

El origen de esta leyenda se remonta a la década de los 30’s. Durante años, la carretera que une a las tres ciudades Torreón, Gómez Palacio y Ciudad Lerdo, fue temida por los que por ahí circulaban, debido a que era una de las rutas más transitadas y por lo tanto más peligrosa.

Dados los accidentes que en este punto de la ciudad de Gómez Palacio se registraron, no pasó mucho tiempo para que comenzara a correr el rumor de que en el kilómetro 1140 se aparecía el fantasma de una joven mujer con una larga cabellera castaña, cuyo rostro lucía pálido. Su vestido era blanco, con una falda que le llegaba hasta los pies, como lista para ir de fiesta.

Quienes la han visto cuentan que parece caminar lentamente, y que a veces aparenta flotar de un lado a otro para luego detenerse a la orilla del camino, haciendo señales a los automovilistas pidiendo llevarla; por lo general esa petición siempre era con dirección de Gómez a Torreón.

De acuerdo con el relato, dos fueron los accidentes que entonces conmovieron a la región. Uno de ellos, el de una familia que regresaba de un festejo del conocido Centro Campestre de Gómez Palacio. Al llegar al cruce del ferrocarril, el automóvil en el que viajaba se impactó contra el tren, provocando así la muerte de todos los pasajeros, entre ellos una mujer.

El otro accidente registrado tiempo después, fue muy similar al anterior; una señorita de origen judío, también había perdido la vida en el lugar.

Dos décadas más tarde, un taxista relató a varios periódicos de la localidad, su escalofriante experiencia. Cuentan que era poco después de la medianoche, cuando circulaba por el bulevar Miguel Alemán con dirección a Torreón, cuando de pronto en el kilómetro señalado, una mujer con dichas características le hizo la parada.

El trabajador del volante al recordar la historia del fantasma del 11-40 aceleró su paso “muerto de miedo”. Creyendo haber pasado a la mujer, miró por el espejo retrovisor helándosele la sangre al ver que en el asiento trasero venía como pasajera la espectral aparición.

La impresión fue tal que casi pierde el control del volante y el conocimiento. La joven dama le sonrió en forma macabra y desapareció. Del impacto que sufrió, el taxista cayó seriamente enfermo. Debido a la gran cantidad de percances registrados en este kilómetro, las autoridades decidieron construir un paso a desnivel; sin embargo el fantasma sigue apareciendo.

EL CARRUAJE NEGRO

La leyenda del carruaje negro, según cuenta don Higinio García, ex empleado del Panteón Municipal número I de Torreón, lugar donde laboró por más de 45 años, aún sigue causando escalofríos entre los vecinos cercanos a este sitio.

Entrevistado en el cementerio, cuenta que en la época de la Revolución, unos guerrilleros eran perseguidos por las tropas de Francisco Villa, pues el carruaje en el que pretendían escapar, estaba lleno de lingotes de oro, “eran bastantes”, dice el hombre.

En su afán por escapar con su tesoro, se internaron en la zona en donde ahora se localiza la colonia Nueva Rosita, al poniente de esta ciudad.

“Nadie supo dónde escondieron los lingotes de oro”, cuenta seriamente aquel ex trabajador del Panteón Municipal.

Los guerrilleros no pudieron escapar de las armas de Villa, pero el escondite del oro aún sigue siendo un misterio para todos.

Pero la historia no termina ahí, dice don Higinio. Por las noches, cuenta, se escucha el galopar de caballos tanto dentro como fuera del Cementerio.

“Quienes los han visto, dicen que un carruaje negro llega y se detiene justo en la entrada del Panteón, en donde un hombre se baja y se pierde entre los pasillos de este lugar”.

Nadie ha intentado ver su rostro, pues temen perder la vida en su intento, como resultado de la impresión que esto les pueda ocasionar.

EL CORONEL RAFAEL

La historia del coronel Rafael también se desarrolla durante la época de la Revolución, pero los vecinos de la colonia Maclovio Herrera desconocen los detalles.

Petra Méndez, vecina de este sector, conoce la historia pero no sólo eso, pues asegura haber escuchado varias veces el paso de este coronel, cuya tumba ahora yace abandonada.

“Por las vías del tren (muy cerca de dicha colonia) estaba un jardín de niños, por ahí se dice que vivía el militar”, cuenta aún temerosa la mujer.

Nadie supo cómo murió, sólo recuerdan que un día desapareció sin dejar rastro. Pero de acuerdo con los vecinos de este sector poniente de la ciudad, éste regresa por las noches para recorrer esta zona e incluso el propio Panteón.

Algunos cuentan que también lo hace a bordo de un caballo negro. Por eso, en ocasiones, sobre todo en temporada de calor, se escucha el trotar de un caballo y otras tantas los pasos de este misterioso caballero.

“Por las noches uno lo escuchaba dentro y fuera de la colonia, el relinchar del caballo y uno salía pero no se veía nada”, cuenta Petra.

Pero además, se dice que cuando aparecía este hombre también lo hacía un grupo de mujeres rezando “se escucha sólo el murmullo, no sabemos qué es lo que rezan... nosotros cada vez que las escuchamos también nos ponemos a orar”, dice la mujer con la piel erizada.

Aunque antiguas, estas leyendas continuarán pasando de boca en boca, y de generación en generación entre los laguneros, poniendo la “piel de gallina” a muchos y a otros tantos, sólo arrancándoles una sonrisa de burla e incredulidad.

Una antigua celebración

Desde hace más de 3 mil años, se celebra lo que hoy conocemos como La Noche de Brujas o Halloween. Un grupo guerrero llamado los Celtas, quienes habitaban diversas zonas en Irlanda, Inglaterra, Escocia y Francia, celebraban el 31 de octubre el fin de año con el Samhain, una fiesta pagana.

Con la inmigración europea a los Estados Unidos, principalmente la de los irlandeses católicos en el año de 1846, llegó la tradición al Continente Americano.

Cuando se habla de esta celebración, se piensa en disfraces, maquillaje, fiesta y dulces, pero la tradición dice que no siempre fue así, festiva y alegre, y que los ritos que se practicaban durante la noche tenían un carácter purificador y religioso.

El 31 de octubre es una fecha asociada con los muertos, las almas en pena, las brujas y los hechizos. Estas características se deben también a su cercanía con el Día de Todos los Santos el 1° de noviembre, de tradición católica, y el Día de los Fieles Difuntos que se conmemora el 2 de noviembre, de gran arraigo en México.

La leyenda cuenta que una mujer apodada “La Cubana” luego de pedir “un aventón” en las calles de
la Alianza, pide la lleven al Panteón, lugar en donde desaparece.
La leyenda cuenta que una mujer apodada “La Cubana” luego de pedir “un aventón” en las calles de la Alianza, pide la lleven al Panteón, lugar en donde desaparece.

Leer más de Reportajes

Escrito en:

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Reportajes

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Muchas son las historias de fantasmas que se desarrollan en el interior del Panteón Municipal. (Fotografías de Ramón Sotomayor)

Clasificados

ID: 389895

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx