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La otra versión

Yohan Uribe Jiménez

Esta semana que transcurrió en Caracas llena de tensiones nos deja un interesante capítulo para recordar. El Gobierno de Venezuela mediante el uso legítimo que tienen todos los estados sobre el espacio geoestacionario y el espectro radioelectrónico “un bien de carácter público para el imperio de la Ley” decidió no renovar la concesión del canal RCTV.

Esta misma fue dada por el año de 1953 a la familia Phelps, lo que no es nuevo y que no lo dicen algunos medios de comunicación, es que hace como 20 años el entonces Gobierno de Lusinchi en Venezuela le había hecho la advertencia a los propietarios del canal que su licencia vencía en 2007 y que podría ser no renovada.

Un dato curioso es que Gobiernos tanto de derecha, como de centro en Venezuela, me refiero al de Carlos Andrés Pérez y Luis Herrera Campins, ya habían sancionado en repetidas ocasiones al mismo canal televisivo por sensacionalista, tendencioso, pornográfico y manipulador, eso también está en las páginas de la historia Venezolana.

Si hablamos jurídicamente la decisión fue tomada conforme a derecho, como lo afirmaron los tribunales, existe una jurisprudencia emitida durante el Gobierno de Carlos Andrés Pérez, donde una decisión de este estilo ya había sido tomada, recordemos que la cadena venezolana CVTV, que era privada, pasó a manos del Estado y fue eliminada la publicidad de carácter comercial.

En mi opinión no me parece arbitraria la decisión del Gobierno venezolano, tampoco creo que atente contra la libertad de expresión, esto en Venezuela ya había pasado y en un Gobierno de derecha, además hay que tener en cuenta que la televisión pública es más valiosa que la privada, más cultural, más educativa, además es una ventana completamente abierta a los artistas y creadores que de lo contrario no contarían con un espacio para su dar a conocer su trabajo, una televisión pública no genera ganancias millonarias, por eso para muchos sectores no es rentable, pero en cambio la televisión y la radio públicas tienen una mayor calidad que las privadas basta con recordar la BBC de Londres y TV Española. Por mencionar algunas.

Es justo y necesario hacer la aclaración a fin de no herir la susceptibilidad de algunos lectores, que el suscrito es un total defensor de la libertad de expresión, que inclusive ha sido víctima de la censura, la violencia y el exilio a causa de sus opiniones sobre todo por la defensa de los derechos humanos.

En este caso es justo decir que cadenas televisivas mundiales que no realizaron ninguna protesta cuando en el Gobierno de Carlos Andrés Pérez se cerró por primera vez en Venezuela una cadena de televisión, si están creando un pánico en el inconsciente colectivo con la decisión de Chávez, claro que no es necesario aclarar que en el primer Gobierno los Estados Unidos estaban totalmente felices con los acuerdos comerciales que realizaba con Venezuela, por eso el cierre de una canal no tenía importancia, en cambio ahora que los norteaamericanos no comulgan con el actual Gobierno venezolano, más bien no permiten que se cubran informativamente cosas que han pasado en el país del sur, como el anuncio de la apertura de 29 centros educativos de carácter público, la creación de 176 nuevos supermercados donde las clases menos favorecidas pueden comprar a más bajo costo la canasta familiar, el aumento de las becas artísticas y culturales y una serie de cosas que sí se han dado a conocer en medios más imparciales.

Yo no soy chavista, lo aclaro, pero tengo que reconocer que no nos podemos quedar con una sola versión de los hechos, así que es mejor enterarnos de “la otra versión” y después sacar nuestras conclusiones.

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