Aunque cientos de fieles se dieron cita este viernes en la parroquia de San Judas Tadeo de Torreón, quedaron atrás aquellas multitudes que se registraban durante todo el día 28 de octubre para celebrar al santo patrono de las causas difíciles y desesperadas.
Y es que hasta antes de la pandemia del COVID-19, eran miles de fieles los que se reunían tanto dentro como fuera del templo para dar gracias por los favores recibidos por su intercesión y algunos más, para solicitar nuevos favores.
Pero este año, la explanada de la parroquia no lució abarrotada como años atrás.
Tampoco se observaron los grupos musicales "peregrinando" con las mañanitas para poder deleitar a los fieles que entraban y salían del templo para dejar sus flores, sus veladoras o simplemente persignarse ante la gran imagen de San Judas Tadeo que se ubica a la derecha del altar.
Samuel Lozano, párroco de San Judas Tadeo desde el 23 de octubre de 2019, comentó que la cantidad de fieles registradas en estas fiestas patronales, superaron por mucho las que acudieron el año pasado.
"Yo tengo dos años aquí apenas, me tocó la pandemia, yo creo que la afluencia ha sido más que el año pasado, porque calculé entre 8 mil a 10 mil personas, y ayer (jueves) tan solo de 7 de la tarde a 11:30 de la noche ya habíamos superado los 5 mil, en las misas hubo muchísima gente", aseguró el sacerdote.
También, aseguró que la celebración eucarística de las 10:00 de la noche del jueves, estuvo concurrida, sobre todo porque un mariachi tocó las mañanitas, calculó que acudieron cerca de 1,300 personas.
La baja afluencia que se registró después del mediodía de ayer, el sacerdote la atribuyó a los vientos que se registraron durante gran parte de la mañana.
PARA DAR GRACIAS
Ataviados como San Judas, con flores amarillas y blancas, con veladoras, con música y sobre todo con fe, es como fueron llegado hasta el templo ubicado en la colonia Las Torres, cientos de fieles para agradecer los favores concedidos por su intercesión.
Como Sandra quien acudió con su hija de tres meses de edad, a la que vistió como el santo para dar gracias por su llegada a su vida, luego de esperarla por más de dos años. Su compromiso es, llevarla al templo cada 28 de octubre.
Para este año, la parroquia pidió a San Judas Tadeo que todos los que son devotos de él, puedan ser ese bastón que porta su imagen, de aquellas personas que así lo requieren, que requieren de ese apoyo.
"Ser aquel bastón donde se puedan sostener aquellas personas que están tristes y especialmente yo he pedido, que muchos que tienen a sus padres de edad avanzadas, los hijos se conviertan en ese bastón para sus padres que los necesitan, que se encuentren por la edad, con dificultades para caminar, para hacer muchas cosas, ese es un mensaje que he dado días previos".
BAJA AFLUENCIA
Leticia López, Ernestina Delgadillo, Patricia López, comerciantes de hace más de 20 años, y que en cada celebración se instalan en los alrededores, manifestaron que las ventas bajaron en más de un 50 por ciento, hecho que atribuyeron a la pandemia.
Antes de la pandemia, "era mucha gente a toda hora, desde las 5 de la mañana ya había movimiento, no se podía ni pasar", dijo Leticia. El año pasado, recordaron, fueron solo dos puestos los que se instalaron, y en este año fueron casi una veintena, sin embargo la baja presencia de fieles fue notable.
Aunque el templo lució abarrotado, no se registraron las grandes cantidades de devotos como antes de la pandemia en la parroquia. (FERNANDO COMPEÁN)
