¿QUÉ ES UN FREE?
–Un free, es como ser amigos con derechos o novios sin compromiso. Se da casi siempre con niñas más abiertonas, ya sabes, que salen contigo y que te “prestan”. –Un free es tener sexo sin tener que andar. Aunque a veces, no sales con nadie más, no le das la importancia de un noviazgo.
–¿Qué tan frecuente se da? Les pregunto a una serie de jóvenes entre los 18 y 25 años. –Mira, depende de la niña. A veces es fácil, conoces a una niña en el antro y te echas un free. Con otras, necesitas dos o tres salidas. Las niñas más inteligentes, no se dejan, saben cómo manejarla y me caen bien. –Cada vez es más común, en especial de vacaciones. Hay niñas fresas, que en su ciudad o con los niños que conocen no andan de free, sin embargo en las playas es más fácil. No te conocen ni saben nada de ti ni tú de ellas. A estas niñas les decimos las Yolis, porque se destapan sólo en Acapulco.
–¿A qué edad empiezan con los frees? –Como en tercero de secundaria y en la prepa, ya en la Universidad es diferente, hay más compromiso o andas más en serio. –Es más fácil que se dé en las grandes ciudades que en las pequeñas, porque ahí, el chisme es gruesísimo y se acaban a las niñas. Se cuidan más.
–¿Qué porcentaje de los jóvenes de tu edad crees que tengan o hayan tenido uno o varios frees? La respuesta de todos varió entre el 40 y el 50 por ciento.
–¿Por qué crees que sea esto? –Porque es mejor andar con niñas que son “compartidas”, con la que haces todo, si quieres le hablas, si no quieres no, que con una novia te exige. –Es muy cómodo. –Se han perdido los valores. –Es falta de compromiso de alguno de los lados, o de ambos. –Porque el rollo del noviazgo, me da flojera, ir a ver a sus papás, tener que hablarle todos los días, salir siempre con la misma. –Porque las niñas se dejan más fácil que antes. –Antes veías mal a la niña que sabías que se han acostado con alguien, ahora es más normal, incluso le pasas el dato a tus cuates. –Siempre respetas más a las niñas que no se dejan, te pican más. –A veces, lo hago para apantallar a mis amigos y poder contarles al día siguiente. –Falta de comunicación entre los papás y los hijos.
–Tú como hombre, ¿qué piensas de la niña con la que andas de free? –Pues al principio dices, qué buena onda, sabes que es para eso, luego te aburre, te deja de interesar. –Le pierdes el respeto. –Si quieres andar con alguien en serio y te enteras que ya tuvo varios frees, te da pa’bajo. –Yo por ejemplo, llevo dos años con mi novia, y te puedo decir que no hemos llegado al final, y eso me pica durísimo.
–A veces, después del free, la relación evoluciona a una amistad.(¡¡!!)
–¿Están conscientes de las EST, enfermedades sexualmente transmitidas? –La verdad no. –Las niñas son más conscientes y te exigen que te protejas, a los niños, sí te dan chance, no la desaprovechas y ni la piensas. –No, sólo me preocupa no embarazarme. –A veces te preocupa el SIDA, depende con quien estés...
–¿Te informan sobre esto tus papás o en el colegio? –¡Para nada! En el colegio, no te enseñan nada sobre maneras de cuidarte ni te hablan de las enfermedades sexuales, ni de la semana en que estás más fértil. ¡Nada! Con mis papás, el tema nunca se toca. Como que les da pena...
–¿Cómo te informas sobre la sexualidad?
–En la tele, en el cine, en Internet, revistas y con mis compañeros (que a su vez se informan en los medios). Fue la respuesta general.
Sin duda, hoy en día, el free es una opción. Sin embargo, considera lo siguiente: El sexo es una maravilla, un gozo, pero podemos compararlo con el fuego. Si el fuego está en la chimenea, ¡qué delicia! El calor calienta y reconforta; pero si el fuego está en el piso de tu sala, es una gran amenaza que te puede destruir. No exagero. Tener sexo es una gran responsabilidad y tiene un precio. ¿Cuál es el precio? Te puedo decir que hay de tres tipos: los físicos, los morales y los emocionales.
Piensa...
Alma, después de que se embarazó a los 17 años y tuvo que dar su bebé en adopción, me dijo: Si yo hubiera sabido todo lo que me iba a suceder, hubiera tomado otra decisión. Un día, salí a un antro con unos amigos, y después de haber tomado algunas cubas, un niño que me gustaba me llevó a su coche e hicimos el amor. Salí embarazada, y mi vida cambió para siempre.
De acuerdo al INEGI, en México, cada año se embarazan 500 mil adolescentes que representan el 25 por ciento de total de embarazos que se registran en el país. Esto por lo general es por descuido, falta de información o falla en los métodos anticonceptivos. Y del total de jóvenes que reconocen tener relaciones sexuales, el 48 por ciento no usa anticonceptivos.
¡Sí te puede suceder! Muchos adolescentes no comprenden que se requiere de una sola vez. El uso de un preservativo, no es garantía de protección. Su eficacia es del 87 al 90 por ciento según la OMS.
Los medios, a través de los que te informas, te presentan sólo el lado maravilloso y atractivo del sexo y te hace sentir que un free, es lo más normal y que todos lo hacen. Nunca te presentan los riesgos que esto puede tener. ¿Sabías que hoy, existen más de 50 enfermedades sexualmente transmitidas y que 25 de ellas son muy frecuentes entre los jóvenes y el 30 por ciento son incurables? Y que ¿tres de cada diez jóvenes entre 18 y 28 años tienen una EST? ¿Y que el 70 por ciento ni siquiera sabe que la tiene porque es asintomático? Por lo que antes de tener un free, piénsalo e infórmate bien. Además, el verdadero amor... sabe esperar.
