El presidente de Argentina, Mauricio Macri, pidió ayer a las empresas españolas que "sigan teniendo" y "amplíen" su participación y sus inversiones en el país suramericano, durante la apertura del Encuentro Empresarial Iberoamericano celebrado ayer en Buenos Aires.
En un auditorio que congregó a miembros del Gobierno argentino y representantes de instituciones regionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y diplomáticos españoles, el mandatario pidió a las empresas del otro lado del Atlántico que "se sumen a la ola de esperanza y entusiasmo que recorre" el país.
Macri recordó que la "comunidad española" tiene una "enorme participación" en Argentina y que es su "segundo inversor" pero que ahora el país necesita "ayuda" en sectores estratégicos.
Por ello, pidió a los participantes del encuentro organizado por la Cámara Española de Comercio de la República Argentina que "se involucren" en sectores como la energía sustentable, la alimentación y, sobre todo, en infraestructura.
"Vamos a ser muy agresivos en términos de inversión", aseguró el presidente en referencia a las infraestructuras, "porque es la plataforma sobre la cual se basa el crecimiento en estas otras áreas". Macri resaltó que en los primeros meses de su Gobierno se ha abierto una "nueva etapa", venciendo el "escepticismo", pese a que hacía cinco años que no se creaba empleo, que se arrastraba una inflación del 700 % y que los 12 años de Gobierno kirchnerista legaron un "Estado desquiciado" sin capacidad de resolver problemas.
En ese sentido, el presidente argentino prometió seguir el camino de "ser previsible" y de la "sensatez" para "estimular el desarrollo".
Para alcanzar su principal objetivo de Gobierno, la "pobreza cero", la creación de empleo es un "eje" central y para ello es necesario atraer inversiones que apunten a "agregar valor", explicó Macri".
POR CIENTO
De inflación se registró en 12 años.
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