Brigada. Una brigada multidisciplinaria de la Jurisdicción visitó el campo Las Ánimas. (CORTESÍA)
En condiciones deplorables viven jornaleros agrícolas en el campo conocido como Las Ánimas, en el rancho el Lucero, el cual se localiza en el ejido Benito Juárez, en Francisco I. Madero.
Autoridades sanitarias confirmaron las insalubres condiciones en las que se alojan los 750 trabajadores del campo que provienen de los estados Hidalgo, Veracruz y San Luis Potosí y que fueron contratados para trabajar en la producción de tomate y chile.
En los camastros sólo colocan un pedazo de cartón que utilizan como "colchón" y estaban infestados de chinches, por lo que el personal de la Jurisdicción Sanitaria fumigó toda el área y fue necesario quemar los cartones, cobijas y parte de la ropa de los jornaleros para terminar con la plaga.
En los lugares utilizados como dormitorios, que no es más que "galerones" construidos con láminas, se alojan hasta seis personas en cada "habitación", mismas que carecen de ventilación. En esas condiciones sobrellevan la extenuante vida laboral los cientos de hombres y mujeres, algunos de ellos menores de edad, de entre 16 y 17 años.
En cuanto a la alimentación se cuenta con un comedor en donde se les sirve comida de acuerdo a sus usos y costumbres; pasta, frijoles y tortillas y ocasionalmente carne.
Durante los días 29, 30 y 31 de julio una brigada multidisciplinaria de la Jurisdicción Sanitaria número siete, visitó el lugar para ofrecer atención médica y realizar una campaña de promoción a la salud y fue como se detectaron las irregulares condiciones en las que los empleadores mantienen a los trabajadores.
En el Departamento de Regulación Sanitaria, se informó que la plaga de chinche se encontraba en todas sus etapas; larvas, ninfas y etapa adulta, alojadas entre los cartones y las cobijas y pesar de la presencia del insecto no se detectó a ninguna persona con algún padecimiento por la plaga.
Otra irregularidad que se detectó fue que el agua que beben no está clorada, pues la toman de una noria que se localiza en el predio y no se tiene el adecuado manejo de los agroquímicos, aunque en este caso no se pudo determinar si los propietarios de la empresa no los dotan del equipo necesario o si los trabajadores prefieren no utilizarlos por practicidad.
