Los infantes son los más vulnerables al desarrollo de alergias, por la ingesta de determinados alimentos que pueden ocasionar diversas reacciones adversas. (ARCHIVO)
La investigadora del Seguro Social, Ruth de Celis Carrillo, afirmó que los infantes son los más vulnerables al desarrollo de alergias, por la ingesta de determinados alimentos que pueden ocasionar diversas reacciones adversas.
La Investigadora de la División de Inmunología del Centro de Investigación Biomédica de Occidente (CIBO) del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, consideró que por ello, la alimentación de los niños debe ser vigilada.
Recalcó que desde las primeras etapas de la vida e, incluso, durante el embarazo y la lactancia, la madre debe restringir al bebé, el consumo de ciertos alimentos considerados alérgenos, para evitar hipersensibilizarlo.
“En el embarazo, las defensas de la mamá bajan, su sistema está inmunodeprimido, a fin de proteger el desarrollo del bebé, y de esta manera puede desarrollar todo tipo de alergias, además de que ciertos alimentos que consuma los va a pasar al feto, por eso debe evitar las nueces, camarón y otros alimentos que son alergénicos”, explicó.
Añadió que en etapas escolares, se debe estar atento a las reacciones adversas que los niños pueden presentar por el consumo de alimentos con alto contenido de carbohidratos y azúcares refinados; más aún si contienen colorantes y saborizantes artificiales, que constituyen altos riesgos a la salud, al ser sustancias neurotóxicas.
“Los alimentos sintéticos con azúcares refinados tienen este efecto, generan cambios de conducta, tales como la ansiedad en los niños, y basta con retirar de la dieta estos alimentos, no es necesario dar ningún medicamento para esto, excepto el revisar que es lo que está comiendo”, indicó la especialista del Seguro Social.
Puntualizó que las alergias alimentarias pueden manifestarse en las personas de maneras muy diversas, no sólo mediante la presencia de urticarias o ronchas en la piel.
Desde una diarrea frecuente hasta alteraciones en la conducta como: agresividad, hiperactividad, problemas para dormir, incluso, dolores articulares, pueden ser resultado de reacciones adversas o alérgicas a los alimentos.
La investigadora del IMSS Jalisco señaló que ante cualquier indicio de malestar, se debe pensar en primer término en la alimentación que está llevando la persona que está experimentando reacciones y, de esta manera, ir retirando uno u otro alimento para confirmar que esta sea la causa.
De Celis Carrillo recordó que existe el riesgo de que frutas y verduras, incluso, sean cosechadas a base de fertilizantes y pesticidades tóxicos y dañinos para la salud.
Otros riesgos de algunos alimentos no preparados de manera natural, refirió, es que pueden incluir almidones y proteínas e, incluso, algunos elementos como el glutamato monosódico, el cual advirtió tiene como objetivo el intensificar el sabor de los alimentos para hacerlos más “atractivos” al paladar.
“La persona sigue consumiéndolos e, incluso, puede desarrollar cierta adicción, debido a que bloquea la señal de saciedad en el cerebro”, acotó.
Recomendó consumir en la medida de lo posible, los alimentos que sean preparados en casa, de forma natural, evitando la ingesta de conservadores, colorantes, edulcorantes e intensificadores de sabor (glutamato monosódico).
