Profesionalizar al político
Exacto..! La solución correcta para acabar con todos los males que rodean al político, se debe profesionalizar su carrera y los puestos a elección popular blindarlos como se hace con cualquier puesto de una estructura organizacional de la Empresa Privada, incluyendo sus prestaciones de Ley. Por ejemplo, si existiera un Licenciado en Administración Pública con Maestría en Funciones de Gobierno o un Master en Diseño de Leyes con Doctorado en Medio Ambiente, sería fabuloso porque ya no tendría razón de ser, la contratación de tanto “Asesor de Gobierno” (amigos y parientes incompetentes) que únicamente inflan improductivamente el costo de la Nómina.
Primero, al igual que en cada vacante, se debe saber el perfil de cada puesto, los beneficios de los mismos y por ende; los requisitos de debe cubrir cada Candidato y sus competencias. En la etapa de reclutamiento, cada Candidato deberá pasar por diferentes entrevistas y evaluaciones de conocimiento, de salud física y mental además de comprobar sus antecedentes sociales, académicos, profesionales y de experiencia para que finalmente, sacar a la luz pública los mejores elementos y los que no, descartarlos de cualquier contienda electoral.
El fuero hay que declararlo inconstitucional, hay que eliminarlo de cualquier puesto, empezando con el puesto del Presidente de la República porque ante la Ley, todos somos iguales, somos mexicanos. Una vez que un mexicano es elegido a cualquier cargo público, deberá desligarse del partido político que lo representa o sea, deberá apegarse obligatoriamente a su juramento, de tal manera que sus decisiones deberán obedecer siempre al interés común de los mexicanos y no a los intereses de un partido político determinado o a otros intereses de obscuras intenciones. De esta manera, en las Cámaras desaparecerán todas las bancadas y ya no será necesario postular Candidatos plurinominales, entonces se podrá reducir la cantidad de Diputados y de Senadores, no serán necesarios tantos inútiles que ahora se enriquecen y actúan de manera impune.
Como cualquier trabajador mexicano, los políticos en funciones deberán acogerse a nuestra Ley Federal de Trabajo en todos sus términos, al igual que sus sindicatos. Los beneficios serán exactamente los mismos de acuerdo a cada nivel y a las funciones de cada puesto. El IMSS i el ISSSTE serán sus instituciones de salud de cabecera, exactamente con la misma oportunidad de pensión y de jubilación. Las prestaciones dejarán de ser extraordinarias y superfluas adecuándose a la realidad económica de las finanzas públicas.
Los gastos de viaje, alimentos, vehículos, combustibles y equipo serán estrictamente los necesarios para desarrollar eficientemente sus funciones, separándolos de sus gastos familiares y personales. Los viajes al extranjero, serán estrictamente los necesarios y necesariamente productivos. Podrán trabajar familiares y parientes sí, pero no en la misma institución o dependencia siempre y cuando se apeguen a las condiciones de contratación y competencias.
Esta, creo que es la única forma de eliminar tanto parasito y los que elementos que se incorporen, lo harán de manera productiva; porque si así fuera, los Candidatos, Partidos Políticos y Sindicatos estarían dentro de una normatividad ajustados a los intereses de la nación. Las contiendas políticas serían más interesantes y maduras, lejos de la payasadas (perdón por lo payasitos que de su trabajo honrado se ganan el sustento para su familia) que ahora se publica
Juan Antonio Aguilar Tello.
Torreón, Coah.
