Reapertura. Con la función de Mitrovica reabrió puertas el Teatro Garibay.
En punto de las 19:05 horas de ayer, dio inicio la función ofrecida por la compañía de danza contemporánea Club Mitrovica imagen+movimiento, encabezada por la coreógrafa Andrea Chirinos, en el Teatro Alfonso Garibay, en el segundo día del Encuentro Nacional de Danza.
La coreografía, congregó un espacio donde las sensaciones de los elementos audiovisuales generaron una atmósfera de incógnita y contradicción. Durante aproximadamente 45 minutos, las cuatro mujeres y tres varones que protagonizaron la obra, portaron un atuendo sencillo, sin calzado, como alegoría de evocación a los sueños.
El espectáculo empezó con una presentación de la compañía, donde algunos de los integrantes sostenían grandes álbumes con fotografías. Inmediatamente, el abrazo entre la música y la mímica se interrumpía por varios silencios.
Después, la aparición de un listón con grabados de siluetas humanas colgando de él, permitió la interacción de los bailarines con el público al bajar dos de ellos al escenario y hacer pasar los grabados por debajo del respetable, para que parte de éste tomara algunos y los observara, mientras la parte restante de integrantes, finalmente, se tiraba al suelo, asemejando una muerte.
Al terminar la función, la directora del Teatro Isauro Martínez, Claudia Máynez, respondió a los comentarios de algunos asistentes por el fuerte olor a pintura y la falta de butacas debido a la reciente remodelación del Garibay.
"Fue algo que se hizo en 15 días, hay que ponderar el trabajo (...) hace menos de un mes se tomó la decisión de rehabilitar el teatro, las butacas serán traídas del TIM (...) se pintó absolutamente todo, se raspó todo lo que estaba mal, se le metió aire acondicionado y se arregló el piso del foro" dijo.
