La planta estaba suspendida temporalmente mientras adecuaba sus instalaciones para evitar que los residuos de algodón salieran del lugar. (Archivo)
Dependencias municipales determinaron clausurar en forma definitiva la planta despepitadora Zapata, por incumplir acuerdos para dejar de ocasionar molestias a los vecinos de alrededores.
En días pasados la empresa se incendió y esto aumentó la inconformidad de familias que habitan el fraccionamiento San Patricio, quienes ya habían solicitado la intervención del Municipio por las emisiones de partículas de algodón que les ocasionaban problemas respiratorios y alergias, así como por los ruidos excesivos las 24 horas del día.
La planta, propiedad de José Ángel Pérez Berrueto, estaba suspendida temporalmente mientras adecuaba sus instalaciones para evitar que los residuos de algodón salieran del lugar, pero se incendió mientras se hacían trabajos de soldadura con ese propósito.