No se trata de ningún experto matemático o físico, sino de un pasajero de tren común y corriente que fue captado por otro armando un cubo Rubik con una sola mano y con asombrosa habilidad logró completarlo en menos de dos minutos.
El chico no dudó de su capacidad para armar el famoso juguete, así que para que el viaje no se le hiciera tan largo se animó a resolverlo de esta peculiar manera.
Quizás no consiguió romper el récord mundial de cubo Rubik, pero sí ha logrado sorprender a más de un internauta por su impresionante capacidad para maniobrar una a una de la piececillas del cubo con una sola extremidad.
El chico pudo completar el cubo sin mucho esfuerzo, con una sola mano y en menos de dos minutos. (YOUTUBE)