Puerta. La banca de segundo piso puede operar de manera directa e indirecta para otorgar créditos al sector productivo. (ARCHIVO)
El Gobierno federal ratificó su intención de consolidar a la banca de desarrollo como pilar fundamental de acceso al crédito y la palanca de la actividad productiva.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP) expone que a partir de la reforma financiera, la banca de desarrollo inició una nueva etapa en la que profundiza sus acciones para la atención de la población en los sectores de mayor impacto económico y social, que hasta antes de la reforma tenían acceso limitado al financiamiento.
Refiere que en años recientes, la banca de desarrollo había mantenido una política conservadora en el otorgamiento de crédito, ya que se había enfocado en mantener niveles de capitalización altos y una cartera de clientes con bajos índices de morosidad.
La reforma financiera promulgada el 9 de enero del año pasado consideró una serie de medidas con la finalidad de ampliar el financiamiento de dichas instituciones, fortaleciendo y flexibilizando su operación.
Así se redefinió su mandato estableciendo como prioridad brindar acceso al crédito, dar asistencia técnica y capacitación para impulsar el desarrollo económico, señala la dependencia en el Reporte Semanal del Vocero. Refiere que se fortaleció a los órganos de gobierno de estas instituciones financieras, para que determinen la estructura organizacional y las necesidades de recursos humanos que propicien un mejor funcionamiento de los mismos.
También se establecieron obligaciones en materia de inclusión financiera y equidad de género; se definieron sectores prioritarios de atención como las micros, pequeñas y medianas empresas y el campo, y se consideraron medidas para una canalización eficiente, prudente y trasparente de los recursos.
De 2014 se dio la reforma financiera.
⏰