Mercado Alianza de Torreón
Creo yo que no hay quien no conozca o sólo sepa que existe en nuestra ciudad el Mercado Alianza, gran fuente histórica de nuestra ciudad, llena de historias de todo tipo algunas ciertas otras no tanto, para algunos lugar lúgubre que sólo lo visitan personas del pueblo, esto no podría ser más alejado de la realidad, solamente que se ha hecho una fama -por cierto bien ganada- ya que desafortunadamente es un lugar que lo único que necesita es orden.
Esto quiere decir: limpieza, respeto del derecho de los demás, aplicación de la autoridad, todo esto no existe ya que ahí ya cada quien hace lo que a sus intereses conviene sin importar si afecta la de terceros, necesitamos urgentemente que las autoridades principalmente las de Plazas y Mercados hagan su trabajo poniendo orden
Y como dijo una persona que no recuerdo ahorita su nombre ; “ si no pueden renuncien”, solo que hagan su trabajo, pareciera que les estamos pudiendo un favor, siendo que es su trabajo.
Tenemos que entender todos ,que la gente que cobra cualquiera dependencia ,de cualquier tipo o nivel debemos de recordar que son nuestros EMPLEADOS, es una cosa que en pleno siglo 21 la gente no comprende, el día que realmente la sociedad, entienda esto va a cambiar.
Y regresando a nuestro mercado alianza es lo que yo creo nos salvaría; dos cosas ORDEN y RESPETO.
Raúl Durarte
Ciudadano de Torreón
La eternidad nos espera
Ante momentos concretos, la muerte de un ser querido o el final de algún acontecimiento como por ejemplo el de un año o la festividad del Día de Difuntos, etc., nos solemos platear el problema de después de... Y es que la eternidad nos espera. Nos preocupamos mucho de lo terrenal que va a durar muy poco. Nos preocupamos de la salud, del dinero, del éxito, de nuestra imagen, etc. Todo esto es transitorio. Lo único que va a perdurar es lo espiritual. El cuerpo se lo van a comer los gusanos. Lo único que va a quedar de nosotros es el alma espiritual e inmortal.
Con la muerte no termina la vida del hombre: se transforma, como dice el Prefacio de Difuntos. Palabras de Santo Tomás Moro sobre la morada en el cambio de destino. Los que niegan la vida eterna es porque no les conviene. Pero negarla no es destruirla.
La verdad es lo que Dios nos ha revelado. Cualquiera situación o circunstancia es un buen momento de hacer balance. No sólo económico, sino también espiritual y moral. No podemos olvidar que la eternidad nos espera.
Pedro García,
Girona, España.
