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CRÓNICA LERDENSE

La fuente de la alegría

Fuente de la Alegría del parque Victoria de Lerdo.

Fuente de la Alegría del parque Victoria de Lerdo.

JOSÉ JESÚS VARGAS GARZA, CRONISTA OFICIAL DE LERDO

El 24 de junio de 1960, el alcalde de Lerdo Emilio Cárdenas, anunció que dentro de las instalaciones del Parque Guadalupe Victoria frente a la capilla de San José y cerca del Monumento a la Madre se construiría una Fuente de la Alegría, con características similares a la que se encontraba en el parque "Guadiana" de la Ciudad de Durango. El motivo de la obra fue para que los niños tuvieran un espacio donde se divirtieran y jugaran chapoteando con el agua. La fuente de la alegría se construyó a iniciativa del Gobierno que preside el Lic. Francisco González de la Vega.

Para ese fin el Ayuntamiento constituyó un Patronato Pro Construcción de la "Fuente de la Alegría", formado por personalidades muy distinguidas de Ciudad Lerdo. Como Presidente efectivo quedó el Sr. Héctor Sotelo González, jefe del Departamento de Tránsito de Lerdo: Secretario, Edmundo Ibarra y Tesorera, Srita. Valentina Guerrero Bautista y presidentes honorarios los licenciados Francisco González de la Vega, gobernador del Estado y Oscar Valdés Flores, Secretario General de Gobierno, y el Sr. Antonio Ramírez, director general de Tránsito en el Estado.

En julio, Héctor Sotelo, proyectó actividades con miembros del Patronato para recaudar fondos para costear los gastos. Mientras el Gobierno del Estado encomendó al Arq. Benito García, Jefe del Departamento de Obras Públicas de Durango, para que dictara las primeras medidas para la elaboración de los planos. Para la construcción de la Fuente de la Alegría se estimó un costo de más de 120 mil pesos, para invertirse 40 mil y 80 mil en el conjunto ornamental escultórico de 15 esculturas que adornarían la "Fuente de la Alegría". El Patronato demandó la cooperación de todos los sectores sociales para llevar a cabo la obra. Aunque el gobernador de Durango, Lic., Francisco González de la Vega, aportaría las esculturas de bronce que servirán de adorno.

La obra de la Fuente de la Alegría todavía para septiembre no había iniciado los trabajos, pero se continuaba reuniendo fondos económicos. No fue hasta octubre cuando los trabajos se iniciaron realizando la excavación para los cimientos y luego la construcción de muros. No obstante, las obras de la fuente de la Alegría no se terminaron para el año de 1960, pues éstas fueron lentas.

Fue para enero de 1961 en que se reanudaron los trabajos y se intensificaron. Dentro de las figuras se esperaba una escultura de una madre y su hijo que elabora un escultor de Durango, con este emblema la obra, sería más representativa para los niños de la ciudad. Para este tiempo el costo de la obra había aumentado su costo a ciento cincuenta mil pesos. Por lo tanto el Patronato ha dado más auge a la recaudación de fondos con los sectores sociales que han apoyado con cooperaciones de dinero, permitiendo así que los trabajos se efectúen en forma ininterrumpida, pues se pretendía que la obra fuera inaugurada para el día de la Madre del mes de mayo.

En ese entonces sale el rumor de que es muy probable que la Fuente de la Alegría, se traslade a otro lugar más apropiado, ya que se consideró que en el sitio donde se estaban realizando las obras era inconveniente, debido a que el tránsito de vehículos era constante, con lo cual se verían en peligro los niños. Por lo tanto se había pensado el traslado de la fuente a otro espacio del parque, donde no hubiera problemas y peligros. En octubre el Gobierno del Estado optó por dejarla allí, pero haciéndole algunas adaptaciones. Por lo tanto las esculturas que adornarían La Fuente de la Alegría ya están poder del Patronato. Ante el retraso de la obra se hace otra tentativa de su inauguración anunciando para ello las fiestas de la Revolución del mes de noviembre.

El Patronato Pro-Construcción de la Fuente, no desmayó de su intención por lograr este regalo para los niños de Lerdo, poniéndole más entusiasmo en este año de 1961 a las actividades económicas, para tal fin realizaron festivales taurinos en la plaza de toros "Alberto Balderas", cuyas utilidades recaudadas en estos eventos solventarían los gastos para la conclusión total de la obra. En los eventos taurinos se presentaban famosas cuadrillas cómicas de aquel tiempo en la talla de La Familia Burrón, novillero Paco de la Vega, lidiando cuatro toros, acompañado por Borola, don Regino, Macuca y Regino Chico.

Presentaciones donde el público lagunero tuvo la oportunidad de admirar al niño torero más pequeño del mundo, el pintoresco y valiente Felipillo Romero, que lidiara a la usanza portuguesa un bravo becerro de la ganadería "El Mirador" de Chihuahua y demostrara que a los nueve años tenía arte y valentía. Estos programas eran interesantes, pues los espectadores se divertían amenamente y se emocionaban con el toreo fino y dramático del triunfador de México, Rafael Reina.

Cerrando el año de 1961, el patronato instaló en diciembre las primeras figuras escultóricas que representaban a unos niños correteando alegremente, y en poco tiempo se completó el conjunto total de las estatuas, además se dotó una bomba y un tanque de presión para la distribución del agua. Aun cuando la obra estaba inconclusa ésta provocaba la admiración de niños y adultos, pues conforme avanzaban los trabajos se apreciaba la belleza de la obra, misma que sería la diversión de los niños, pero también un sitio de descanso para los adultos.

En febrero de 1962, la Junta Provisional de Gobierno de Lerdo gestionó ante el Gobierno del Estado de Durango unos juegos infantiles para instalarlos en los alrededores de la "Fuente de la Alegría". Las esculturas se colocaron estratégicamente sobre bases en medio de la fuente y muros, teniendo su estructura arquitectónica una figura del mapa de Durango. Para mayo estaban terminadas las instalaciones de la "Fuente de la Alegría, y se habían instalado los juegos infantiles gestionados por la Junta Provisional de Gobierno que presidió el célebre Aurelio Gallegos, administración, que ya en septiembre terminaría sus funciones. Las dos obras de referencia convirtieron al parque en un sitio de recreo para los niños, pues tendrían la oportunidad de bañarse y chapotear en la fuente, sin peligro de que les suceda nada, desde luego con el cuidado de sus padres. Siendo los juegos infantiles un atractivo más en beneficio de los reyes del hogar.

Las obras de construcción de la Fuente de la Alegría se lograron terminar en dos años y medio, siendo inauguradas por el Lic. Francisco González de la Vega el 10 julio de 1962. En la emotiva ceremonia y con gran concurrencia se colocó la placa respectiva que dentro del texto dice: "Que donó las esculturas y la construcción la llevó a cabo el Gobierno del Estado en cooperación con el Patronato Pro-Fuente", y fue dedicada a la Niñez.

Esta obra forma parte del equipamiento de esparcimiento para los lerdenses y laguneros, siendo la fuente un sitio donde por muchos años ha funcionado excelentemente dando alegría y bienestar a algunas generaciones de niños. Ha sido objeto de mantenimiento, pero también de vandalismo y robo de esculturas, pues las figuras de bronce han desaparecido en su totalidad. En la actualidad de las 15 esculturas que se colocaron únicamente queda una de bronce y corresponde a una niña y el resto que existe son de yeso y fibra de vidrio. Se acerca la temporada de calor y para que la Fuente de la Alegría de servicio a la niñez, el sitio se necesita que sea rehabilitado lo más pronto posible.

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