Consecuencias. 91 casas quedaron con resabios.
La explosión por gas que se registró el jueves en un hospital infantil en Ciudad de México, en la que murieron 2 bebés y una mujer, ocasionó daños a 91 viviendas, informó hoy el Gobierno del Distrito Federal.
La mayoría de los daños en las viviendas aledañas al Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa fueron por marcos de ventanas dañados y vidrios rotos.
"Hasta ahora fueron sustituidos 100 cristales", indicó el Gobierno capitalino en un comunicado en el que aclaró que está asumiendo los costos de las reparaciones.
El Gobierno también informó que para la remoción de los escombros fue necesario demoler el 90 % del hospital.
Las tareas de remoción continúan en la zona, en donde se distribuyen raciones de comida para trabajadores y vecinos que participan en las tareas.
Ayer sábado otros cuatro heridos abandonaron centros médicos donde se les asistía, con lo que la cifra de personas hospitalizadas por el accidente descendió a 26.
De los pacientes que continúan hospitalizados 11 se encuentran en estado de gravedad, cuatro de ellos son recién nacidos y siete adultos.
La explosión al parecer la ocasionó una fuga de gas en una manguera del camión que abastecía al hospital público, ubicado al oeste de Ciudad de México.
En el incidente murieron dos bebés y una mujer y otras 72 personas resultaron heridas, la mayoría de las cuales han abandonado los hospitales en los que se les atendía en los dos últimos días.
Personal de la Secretaría de Desarrollo Social ya visitó las viviendas afectadas por la explosión de una pipa de gas.
La dependencia indicó que hasta el momento, la mayoría de las viviendas presentan marcos de ventanas dañados y vidrios rotos, por lo que desde el día del siniestro, se iniciaron los trabajos de reparación y hasta el momento se han sustituido 100 cristales.
La titular de la Sedeso, Rosa Icela Rodríguez, acudió a la zona en donde ocurrió la explosión por tercer día consecutivo para visitar a los vecinos afectados .
