Reclamos. Piden a las autoridades esclarecer los hechos y dar certidumbre a los sacerdores en el país.
Con un nuevo "¡Basta ya!" a la inseguridad y violencia, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) exigió ayer al Gobierno esclarecer y castigar a los culpables del asesinato del sacerdote Gregorio López Gorostieta, ocurrido en Guerrero.
Los obispos calificaron de injusta y violenta la forma en la que fue asesinado el párroco que pertenecía al Seminario "La Anunciación", en la Diócesis de Ciudad Altamirano.
López Gorostieta fue secuestrado el domingo en en la región de Tierra Caliente, y encontrado muerto el jueves con un balazo en la cabeza en el Municipio de Tlapehuala, a unos 20 kilómetros de donde fue plagiado.
"Haciéndonos eco del sentir de muchos mexicanos, repetimos: ¡Basta ya! No queremos más sangre. No queremos más muertes. No queremos más desaparecidos. "Exigimos a las autoridades el esclarecimiento de éste y de los demás crímenes que han provocado dolor en tantos hogares de nuestra patria, y que se castigue conforme a derecho a los culpables", dice la jerarquía católica en un comunicado.
En el texto, firmado por el Presidente de la CEM, José Francisco Robles Ortega, Cardenal de Guadalajara, y por el secretario de la Conferencia, Eugenio Lira, Obispo auxiliar de Puebla, los Obispos llaman a los mexicanos, especialmente a los que provocan sufrimiento y muerte, a la conversión y a ser "agentes en la construcción de un México justo, reconciliado y en paz".
Por su parte la Fiscalía General de Guerrero inició una averiguación previa por el delito de homicidio en contra del sacerdote.
El fiscal general, Miguel Ángel Godínez Muñoz, se reunió en Iguala con los familiares del cura asesinado y les ofreció certidumbre en las investigaciones para lograr la detención de los autores del crimen.
Según la Fiscalía, el pasado jueves 25 en la noche, Godínez Muñoz, tuvo una reunión con el Arzobispo de Acapulco, Carlos Garfias Merlos, a quien le informó sobre el avance de las investigaciones.
En tanto, ayer, en la Ciudad de México, los padres de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala dejaron claro que no van a claudicar en la búsqueda de sus hijos.
Advirtieron que mientras no aparezcan los normalistas en el país no habrá paz.
"Las manifestaciones van a seguir, las protestas van a seguir, no vamos a bajar los brazos", reiteró Felipe de la Cruz, padre de uno de los jóvenes sobrevivientes.
Despiden al Padre Goyo en Tierra Caliente
Fieles, feligreses de Tierra Caliente, sobre todo de comunidades de Ciudad Altamirano, se congregaron desde anoche en la catedral calentana Fray Juan Bautista Moya para despedir al cura Gregorio López Gorostieta, cuyo cuerpo sin vida fue hallado este jueves tras ser reportado como desaparecido el lunes.
La misa de cuerpo presente en la catedral fue minutos antes de las 6 de la tarde de ayer viernes. No alcanzaba el espacio en la iglesia para la gente que acudió a decir adiós al padre. El cariño se demostró en la sede católica con lágrimas y flores, sobre todo blancas. El Servicio Médico Forense (Semefo) trasladó los restos del párroco a Iguala el jueves. La dependencia, después de practicarle la necropsia, tardó más de un día para regresar el cuerpo del cura a Tierra Caliente.
Los restos de "Goyito" llegaron alrededor de las 17:30 a la entrada de Ciudad Altamirano, en la glorieta de "Los Niños Héroes", donde lo esperaban decenas de fieles, luego el cuerpo fue trasladado en una carroza fúnebre hasta la catedral, donde se ofició una misa, para posteriormente realizar un homenaje privado en el Seminario Mayor, que era su casa.
Hechos lamentables
Algunos datos sobre asesinato del sacerdote:
-El sacerdote Gregorio López Gorostieta, quien se encontraba desaparecido desde el domingo pasado.
-Fue hallado muerto el 25 de diciembre en el municipio de Tlapehuala, en la región de Tierra Caliente.
-El sacerdote fue secuetrado después de haber celebrado las misas dominicales, según algunos seminaristas.
