Guerra. La lucha de occidente contra el Estado Islámico continúa con gran intensidad. (AP)
La coalición internacional, liderada por Estados Unidos, lanzó ayer 16 ataques aéreos contra posiciones del yihadista Estado islámico (EI) -13 en Irak y tres en Siria-, mientras los peshmergas (kurdos iraquíes) entraron a la ciudad iraquí de Sinjar.
Cuatro de los ataques en Irak tuvieron lugar cerca de Sinjar, en el norte de Irak, donde fueron destruidos edificios, unidades tácticas y vehículos de los yihadistas, mientras los demás fueron contra blancos en las ciudades iraquíes de Tal Afar, Ramadi, Mosul y Baiji.
Con la ayuda de los bombardeos, los peshmergas (kurdos iraquíes) lograron ayer domingo entrar en la ciudad iraquí de Sinjar, ubicada a 120 kilómetros al oeste de Mosul, luego de tres días de enfrentamientos con el EI.
Los peshmergas lanzaron una ofensiva contra Sinjar por tierra, con tanques y artillería pesada, mientras aviones de combate de la coalición internacional les ofrecían cobertura aérea bombardeando posiciones y escondites del EI.
En el marco de una amplia ofensiva en la que participan unos ocho mil militares kurdos, los peshmergas sólo han logrado ingresar en dos barrios de la ciudad, el de Al Shohadá y el de Peshmerga, en el sureste de la ciudad.
Hasta ahora no han logrado ingresar en más zonas por las minas y los artefactos explosivos colocados por los yihadistas en los alrededores de Sinjar, así como en las instituciones gubernamentales de la ciudad.
En Siria, los tres bombardeos de la coalición internacional se centraron alrededor de la ciudad kurda de Kobane, en el norte del país y cerca de la frontera con Turquía, según el Ejército estadounidense.
Sin embargo, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) precisó que la coalición internacional llevó a cabo 12 ataques aéreos contra posiciones y depósitos de armas del grupo yihadista en el norte de Siria.
Explicó que los bombardeos tuvieron lugar en el norte de la provincia de Alepo, en la región de Madajen, situada entre Daqib, un bastión yihadista, y la localidad de Marea, que controlan los rebeldes.
