Los padres y compañeros de las víctimas señalaban a Aguirre como uno de los responsables de la desaparición de los jóvenes, quienes presuntamente fueron asesinados e incinerados en un basurero del municipio de Cocula. (ARCHIVO)
Al menos 253 muertes violentas se han registrado en el estado mexicano de Guerrero desde la desaparición de 43 estudiantes de magisterio el 26 de septiembre pasado en la ciudad de Iguala, según un recuento realizado por el diario Reforma.
De esta cifra, 93 homicidios están relacionados con el crimen organizado, apuntó el rotativo tras destacar que una de las localidades más afectadas es el puerto de Acapulco.
Sólo el martes y miércoles de esta semana ese centro turístico fue escenario de 17 asesinatos en distintos lugares que podrían estar relacionados con la captura de dos operadores financieros del Cártel Independiente de Acapulco (CIDA).
Fuentes federales consultadas por Reforma aseguran que la ola de violencia se explica, en parte, por un "reacomodo del llamado Cártel Independiente de Acapulco (CIDA), liderado por Víctor Aguirre, quien ha sido señalado como familiar del exgobernador" Ángel Aguirre.
Ángel Aguirre se vio obligado a renunciar a finales de octubre pasado como gobernador por la crisis desatada por la desaparición de 43 estudiantes a manos de policías corruptos y miembros del Cártel Guerreros Unidos en una noche en la murieron seis personas y 25 resultaron heridas.
Los padres y compañeros de las víctimas señalaban a Aguirre como uno de los responsables de la desaparición de los jóvenes, quienes presuntamente fueron asesinados e incinerados en un basurero del municipio de Cocula, vecino a Iguala.
Según las fuentes, otra causa del recrudecimiento de la violencia es que la delincuencia organizada perdió "la protección que le ofrecían autoridades locales" con la llegada de fuerzas federales al estado y la depuración de las policías municipales.
