Comediantes. Teo González y el lagunero Rogelio Ramos hicieron reír a miles de personas que asistieron al Teatro Nazas.
Dicen que "la risa alimenta el alma", ayer más de mil habitantes de la Comarca Lagunera lo comprobaron.
Rogelio Ramos y Teo González abarrotaron el Teatro Nazas con un espectáculo que dejó por demás satisfechos a los asistentes, quienes se olvidaron de todo problema gracias al talento de los comediantes.
Al recinto acudieron laguneros de diversas edades. La señora Eva Rodríguez dijo a El Siglo de Torreón que le fascina la manera de hacer comedia de González.
"Él es de los pocos cómicos en México que nos hace reír sin necesidad de albures y tonterías de ese tipo", explicó.
Por su parte, el joven Daniel Buenrostro opinó que procura ir siempre a donde se presente Rogelio. "Creo que Ramos es muy talentoso, un orgullo local", expresó.
A las 18:00 horas gran parte del respetable ocupaba su lugar. Quince minutos después comenzó la amena velada.
González fue el primero en salir al escenario con un número musical. Hombres y mujeres lo recibieron con sonoros aplausos.
"Buenas tardes. Muchas gracias, me dijeron 'Teo quieren que vuelvas a Torreón' y dije 'Será para que devuelva lo que me traje del hotel'", manifestó bromeando.
Teo platicó historias relacionadas con el Mundial de futbol, con el Día de Muertos y las próximas posadas; no faltaron sus chistes de gallegos y su conocido "mic mic".
El artista de igual manera bailó y hasta imitó a Joaquín López-Dóriga o a "Quico".
Antes de las 7:00 de la tarde irrumpió Rogelio Ramos entre fuertes aplausos. Ambos artistas contaron chistes entre sí para deleite de la gente.
Enseguida, el lagunero se quedó solo en el entarimado y dijo: "Me gusta vivir en Torreón donde quiera que voy presumo a mi Comarca".
El llamado "Rey del stand up mexicano" charló de varias temáticas y hasta criticó a la Primera Dama, Angélica Rivera.
"Con cuatro novelas pinchurrientas la señora Angélica Rivera tiene un caserón bruto y seremos muy tontos si creemos la explicación que nos dio", exclamó.
Chiste tras chiste Rogelio complació a sus paisanos, a algunos les provocó dolor de estómago de tanta risa.