La nadadora mexicana Fernanda González exhortó a sus colegas a quitarse el miedo para destacar en la natación.
Pasar de dos medallas de oro a cinco de unos Juegos Centroamericanos a otros es un dato que le significa mucho a la nadadora María Fernanda González. Es darse cuenta de que el sacrificio de irse a entrenar fuera de casa y apartarse de los amigos y la familia ha dado fruto.
"Estoy satisfecha, muy contenta de haber podido festejar tanto con esta gente. Fue superpesado. De verdad, ya ahorita estoy muerta. No quiero saber del agua en mucho tiempo [risas]. Por lo menos no tocaré el agua en un rato. Estaba preparada para esta carga de pruebas, entrené para eso. Me mentalicé para este reto y se cumplieron mis metas", confesó la nadadora, con la voz afectada, cansina, después de participar en nueve pruebas a lo largo de seis días.
En estos Juegos Centroamericanos y del Caribe (JCC) Veracruz 2014 -que concluyeron para la natación ya entrada la noche del pasado jueves- la sirena capitalina se colgó las preseas de oro en 50, 100 y 200 metros dorso, así como 4x100 m relevo combinado y 4x100 m relevo libre. Además, se colgó la plata en 200 m combinado individual.
"Se cumplieron mis expectativas, totalmente. En comparación a hace cuatro años en donde sólo gané dos oros, ahora se dan cinco primeros lugares. ¡Sí es una gran diferencia!", resalto González.
Fernanda apuntó que la vasta cosecha de medallas se debe al fruto de sus entrenamientos con los Gators, equipo representativo de la Universidad de Florida, lugar en el que entrena desde hace un año y medio.
