Represas. Las represas almacenan mucha agua en todo el estado a lo largo de los 39 municipios.
Prácticamente concluye la temporada de lluvias y dos de cada tres metros cúbicos de agua que cayeron en tierra duranguense se fueron a otros estados, sólo el 33 por ciento se quedó en espejos de agua o se filtró en el subsuelo.
Pedro Romero Nava, subdirector Técnico y Operativo de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), explicó que anualmente al estado de Durango suelen caer en promedio 11 mil 387 millones de metros cúbicos de agua que se van directo a presas, ríos, arroyos, represas, ollas de agua, abrevaderos o se filtran para llegar a los mantos freáticos.
Del volumen de agua que cae en el estado, sólo el 33 por ciento se queda en estas tierras, es decir, alrededor de tres mil 863 metros cúbicos, lo que significa que siete mil 500 millones de metros cúbicos de agua suelen irse a otros estados donde son aprovechadas en presas o bien, una parte se va directamente a lo que se conoce como servicio ambiental y termina en el mar.
Las 10 principales presas de Durango y que maneja la Conagua tienen un almacenamiento total de 3 mil 659 millones de metros cúbicos, sin embargo el agua que almacenan no toda ha caído en el año, sino que la mayoría es agua que se queda almacenada de años atrás.
Poco más de siete mil millones de metros cúbicos de agua que caen en Durango corren por ríos directos a otros estados, se van a Sinaloa, principalmente, Coahuila y Nayarit.
En estos estados, comenta el especialista de la Conagua, esos siete mil 500 millones de metros cúbicos no todos se van a presas, en su gran mayoría se usan para el servicio ambiental, es decir, se deja correr por los arroyos y ríos para que los vayan limpiando y regenerando la flora y la fauna de sus alrededores hasta su llegada al mar.
Ante esto, Luis Fernando Uc Nájera, director local de la misma Conagua dijo que es importante el volumen de agua que se queda en la entidad y que es imposible dejar más agua porque no existe infraestructura para ello y segundo, porque una cantidad importante se tiene que regresar al mar, "el agua, aunque caiga en Durango no es nuestra, es de la nación y se tiene que distribuir bien para garantizar que los siguientes años siga lloviendo y sigamos manteniendo este vital líquido", comentó.
