El anuncio del gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, de solicitar licencia al cargo abonará a las investigaciones sobre la desaparición de los 43 normalistas ocurrida en Iguala, así como a mejorar la situación en la entidad, consideraron diputados de diversas fuerzas políticas.
El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Silvano Aureoles Conejo, reconoció la disposición de Aguirre Rivero de solicitar licencia al cargo, en espera de que su separación ayude a resolver el caso.
La decisión habla de una responsabilidad con el estado más allá de un interés personal o de partido por muy legítimos que éstos sean, enfatizó el legislador del Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Consideró que hay un debilitamiento de las instituciones locales y se pronunció porque la salida de Aguirre Rivero sirva para que otros funcionarios en Guerrero y en otras entidades asuman su responsabilidad y acepten que están incumpliendo con su deber de brindar seguridad a la población.
Aureoles Conejo pidió el apoyo federal necesario para quien se haga cargo de la gubernatura, pues no tendrá una tarea sencilla.
El vicecoordinador priista, Manuel Añorve Baños, afirmó a su vez que por encima de la decisión de Aguirre Rivero, para su bancada “está la urgencia de encontrar a los 43 estudiantes de Ayotzinapa”.
El gobierno federal lleva a cabo las investigaciones en la materia e informa a la población sobre los avances, resaltó el legislador del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El también integrante de la comisión especial de la Cámara de Diputados para dar seguimiento al asunto, señaló que esa instancia continuará trabajando para dar resultados a la ciudadanía.
Añorve Baños reconoció que los bloqueos y las marchas de quienes demandan la localización con vida de los estudiantes podrían afectar la economía del estado de Guerrero.
Por separado, el líder de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), José Isabel Trejo Reyes, consideró que la solicitud de licencia del gobernador es una medida ya esperada en los ámbitos nacional e internacional.
Confió que ello permita contar con un entorno de gobernabilidad en Guerrero, que a su juicio ya no se podía dar con Aguirre Rivero en el cargo.
Asimismo, que la decisión del mandatario estatal derive en condiciones de confianza para las familias de los normalistas desaparecidos, porque son los que más habían manifestado su inconformidad.
Confió en que la persona que el Congreso del Estado designe en la gubernatura “tenga un nivel de apertura, de diálogo y de colaboración con las otras autoridades para encontrar lo más rápido posible a los estudiantes”.
El líder de la bancada del PVEM, Arturo Escobar y Vega, consideró que “la separación de Aguirre Rivero de su encargo no solucionará los problemas de forma inmediata, pero sí abre un nuevo puente de confianza e interlocución que responde a las demandas de la ciudadanía”.
Expresó su confianza en que los esfuerzos del Estado mexicano darán frutos no sólo para resolver los problemas de inseguridad en el estado, sino para tener noticias de los 43 normalistas.
El nuevo mandatario estatal tendrá la tarea de reconstruir la confianza en las instituciones, especialmente con las familias de las víctimas, las organizaciones de maestros y la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, enfatizó el legislador del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
A su vez, el coordinador del PRD en San Lázaro, Miguel Alonso Raya, aseguró que la decisión de Aguirre Rivero de separarse de la gubernatura elimina pretextos para que se lleve a cabo una investigación puntual y precisa para ubicar a los 43 estudiantes desaparecidos.
El esclarecimiento de los hechos debe constituir un parteaguas en el país, a fin de que casos de esa naturaleza no se repitan, puntualizó el legislador.
