Una casa, mil opciones
Actualmente existen diversas alternativas para adquirir una vivienda, ¿cuál es la que más conviene?
Nunca en la historia de México ha sido más sencillo adquirir una vivienda como lo es hoy. Existe un infinidad de ofertas por parte de los bancos, además de las otorgadas por el Infonavit y el Fovissste. Hoy en día, la gente puede voltear a cualquier fraccionamiento y si cuenta con un trabajo estable, los desarrolladores realizan una evaluación de sus ingresos y le ofrecen opciones atractivas de crédito.
Si sus ingresos no son suficientes preguntan si su pareja trabaja para reunir sus créditos o bien, le pueden dar la alternativa de combinar un crédito bancario con el Infonavit, incluso el crédito Fovissste con Infonavit.
El mercado es tan competitivo que incluso se han establecido sorteos en donde la población puede acceder a una vivienda además de llevarse la instalación de la cocina o el equipamiento para tener agua caliente, una sala, etcétera.
El mercado hipotecario en términos financieros ya pasó por un crisis en el sexenio de Felipe Calderón e inicios del de Enrique Peña Nieto, pero hoy, dentro de las políticas públicas, vuelve a ser una apuesta.
¿Pero cuál es la opción que más conviene? ¿Siempre es bueno, financieramente hablando, adquirir una vivienda a través de un crédito hipotecario? ¿Qué tan competitivo es el Infonavit?
Pueden ser preguntas lanzadas al aire, pero todos se las han hecho al momento de tener intenciones de comprar una vivienda.
El primer punto que se debe tener claro antes de adquirir una vivienda es la solvencia económica. Es decir, analizar si se tiene un trabajo estable y no existen puntos en el gasto corriente que puedan hacer enfrentar una situación complicada para cumplir con las mensualidades.
Después de tener claro esto es importante pensar en qué tipo de vivienda se puede adquirir, cosa que depende principalmente del estilo de vida, del número de miembros de la familia y los medios de transporte disponibles.
A TRAVÉS DE INFONAVIT
Como se señaló al principio, se puede hacer toda una serie de combinaciones. La primera opción que se debe evaluar es el crédito Infonavit o bien el crédito Fovissste. Estos tipos de crédito son dados por un fondo en donde tienen participación el trabajador, el gobierno y el empresario.
El monto del crédito al que puede acceder a través de Infonavit dependerá de la antigüedad y del salario que se perciba. Los empleados de la iniciativa privada pueden consultar su ahorro de vivienda y el monto que se le puede prestar en la página de internet www.infonavit.gob.mx
No obstante, existen otras opciones que brinda Infoanvit, entre las que destaca Cofinavit. Este tipo de instrumento se puede utilizar cuando el comprador está interesado en adquirir una vivienda con un valor más alto al que se le puede dar con el crédito Infonavit.
En el Cofinavit una parte la presta el Infonavit y otra el banco, y sirve para comprar una vivienda en cualquier parte del país. Aquí el valor de la vivienda no tiene límite. Además el patrón hace una aportación adicional y la parte restante la presta el banco o bien una Sociedad Financiera de Objeto Limitado (Sofol) o de objeto múltiple (Sofome). Dentro de este producto también existe el Cofinavit con ingresos adicionales, en donde si se tienen algunos ahorros también pueden sumarse para que el costo de la vivienda se reduzca.
Por otra parte el Apoyo Infonavit funciona casi similar al anterior, sin embargo, ofrece la opción de que el dinero se preste para la construcción o remodelación, al usar un crédito hipotecario bancario. Aquí el financiamiento del Infonavit funciona como una garantía en caso de que el cliente no pueda cumplir con sus obligaciones.
LA VÍA BANCARIA
Actualmente los bancos también ofrecen infinidad de opciones de productos hipotecarios que pueden o no acompañarse con el crédito Infonavit. Pero para quienes trabajan en la informalidad o perciben su pago por honorarios, las opciones van encaminadas a evaluar la oferta crediticia que tienen los bancos o anteriormente las 'Sofoles'.
Desde 2001, el gobierno creó un institución financiera perteneciente a la Banca de Desarrollo que es sostenida por el Banco de México, denominada Sociedad Hipotecaria Federal, con el objetivo de impulsar la construcción y compra de vivienda. Además de convertirse en un reactivador económico, esta entidad agilizó tanto la construcción de vivienda como el otorgamiento de créditos por parte de los bancos.
Para este año se estima un financiamiento para la construcción de vivienda de 18 mil millones de pesos.
Actualmente las opciones para adquirir una vivienda son variadas, hay que buscar la mejor opción, pero la recomendación general es que si se tiene algún crédito Infonavit o Fovisste es mejor usarlo. Si en cambio, lo que se busca una vivienda con mayor tamaño de las que regularmente se ofrecen es necesario preguntar primero por los productos combinados y sólo en caso de que no sea posible echar mano de esos recursos analizar las opciones que presentan los bancos para seleccionar la que más conveniente.
¿Sabías que?
A mediados de la década de los noventa se dio el boom de las llamadas Sociedades Financiera de Objeto Limitado (Sofoles), entidades dirigidas a otorgar algún tipo de financiamiento para un sector. Bajo este contexto, el crédito hipotecario en México empezó a crecer vertiginosamente ya que las Sofoles obligaron al Instituto Nacional de Vivienda para los Trabajadores a volverse más competitivo.
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