Deficiencia. Diputado señala que se necesita un mayor esfuerzo para impulsar a Durango a un verdadero desarrollo.
Alrededor de 900 millones de pesos es el monto que podrían haber perdido los productores de frijol que llevaron su grano a las empresas acopiadoras de la cosecha 2013, debido a los errores de omisión que cometió Apoyos y Servicios a la Comercialización Agropecuaria (Aserca), organismo que depende de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), del Gobierno Federal.
Esta es la opinión de Roberto Delgado Gallegos, consultor en Mercados Agrícolas, quien recordó que, públicamente, Aserca estableció un precio oficial de 12 mil pesos por tonelada, por lo que, si se considera una cifra conservadora de 150 mil toneladas de la cosecha primavera-verano 2013, y si los productores vendieron a un precio máximo de seis mil pesos, entonces la pérdida por tonelada resultó de seis mil pesos, y la pérdida a nivel estatal de por lo menos 900 millones de pesos en perjuicio de la economía de los campesinos.
En este mismo contexto, el especialista consideró que lamentablemente, Aserca engañó al Gobierno del Estado, pero sobre todo, nuevamente perjudicó severamente a los productores al omitir principios tan importantes como el cumplimiento formal de garantizar un precio de 12 mil pesos por tonelada, publicar oportunamente las reglas de operación, darle un seguimiento puntual a la integración de expedientes para no retrasar el apoyo a los productores y auditar permanentemente a los acopiadores para evitar los actos de corrupción que tanto dañan a los productores y a la imagen de las instituciones.
Y lo peor, dijo, es que además de solapar los malos manejos en que incurren algunos acopiadores, como el pago de apoyos a grandes volúmenes que nunca entraron a las bodegas, mejor conocido como el "frijol de papel", parece ser que en 2014, Aserca pretende favorecer a una sola almacenadora y dispersora de crédito como lo es Almer, quien en años pasados operó en Durango, y los productores la denunciaron por incumplimiento, abusos y total falta de transparencia en sus operaciones.
Delgado Gallegos enfatizó que después del programa fallido de 2013, en el que el precio al productor fue de seis pesos, cuando el Gobierno se había comprometido con un precio al productor de 12 pesos por kilo, parece ser que para el presente año, Apoyos y Servicios a la Comercialización Agropecuaria (Aserca) no cuenta con una propuesta viable que le dé seguridad al productor en recuperar su inversión.
Empleos no se han dado en Santiago Papasquiaro, aseguran.
