En algunas ocasiones, la ficción queda muy rebasada por las casualidades que surgen en la vida real y que han quedado registradas en la historia.
Y es que a lo largo de ésta, hay coincidencias que sorprenden debido principalmente a la forma en que influyeron para que el rumbo del planeta fuera como se conoce actualmente.
Con información de RT, Viralnova, y Guioteca, se presentan cinco casos que así lo demuestran.
1.- Por un giro equivocado
Gavrilo Princip, nacionalista serbio-bosnio, intentó asesinar al archiduque Franz Ferdinan, aunque fracasó. Curiosamente, sin planearlo, cierta ocasión que iba saliendo de una cafetería vio que el coche del archiduque realizó un giro equivocado y pasó por delante del edificio, lo que le permitió llevar a cabo su plan. Si el chofer hubiera tenido mejor sentido de la dirección, quizá la Primera Guerra Mundial se habría evitado...
2.- El cometa lo trajo y se lo llevó
En 1835 apareció el cometa Halley en el cielo, y ese mismo año, en el primer día en que se pudo avistar, nació Mark Twain. Curiosamente, en 1910, en el primer día en que se avistó nuevamente el cometa, Twain murió. El plus de lo curioso es que Mark ya lo había predicho, pues declaró en 1909 que esperaba ir a la muerte con el Halley, que aparecería al año siguiente.
3.- ¿Libro profético?
Algunos años antes de que el Titanic naufragara, un escritor llamado Morgan Robertson publicó una novela titulada "Futilidad", sobre un barco "imposible" de hundir, llamado Titán, pero que choca contra un témpano y se hunde, muriendo la mayoría de sus pasajeros, justo como pasó con el Titanic que, curiosamente, se hundió en el mismo mes que el Titán.
4.- Ya estaba advertido
En los tiempos de juventud de Luis XVI, quien fuera nombrado luego rey de Francia, un astrólogo le advirtió que el día 21 de cada mes debía permanecer en guardia. Ese hombre no pudo haber tenido más razón pues el 21 de junio de 1791, el monarca fue detenido mientras intentaba escapar del país, el 21 de septiembre de ese mismo año Francia abolió el sistema real, y el 21 de enero de 1793, Luis XVI fue ejecutado en la guillotina.
5.- Desataron a un peor invasor
En 1941, Iósif Stalin ordenó a un equipo de arqueólogos abrir la tumba de Tamerlán, líder militar del siglo XIV. Al ejecutar la orden, el equipo se encontró con una inscripción que advertía: "Quien abra mi tumba desatará a un invasor más terrible que yo". Curiosamente, tan sólo dos días después la Alemania nazi liderada por Hitler invadió la Unión Soviética.
