Torreón adicciones Elecciones 2024 INE Salud Coahuila Seguridad Pública Torreón

La estancia de Benito Juárez en Mapimí

Casa que habitó el Presidente Juárez, en Mapimí, en septiembre de 1864.

Casa que habitó el Presidente Juárez, en Mapimí, en septiembre de 1864.

DOMINGO DERAS TORRES

Durante los días en que estuvo en la Comarca Lagunera, Benito Juárez se convirtió en el precursor del reparto de tierras en el norte de México, al dotar de las mismas a los habitantes de Matamoros; atento a las demandas populares en su itinerario hacia Paso del Norte (hoy Ciudad Juárez), dictó resoluciones de beneficio social que lo columbraron como defensor de los desposeídos. Así, Juárez hizo justicia entre los menesterosos que sufrían las amenazas y agresiones físicas de los terratenientes Leonardo Zuloaga y Juan Nepomuceno Flores Alcalde, caciques de horca y cuchillo que apoyaron, en suelo lagunero, a la aventura imperialista de Maximiliano y a su fallido patrocinador Napoleón III. En Mapimí, el presidente Juárez elevó al rango de villas a las poblaciones de Matamoros y Lerdo, el 8 de septiembre de 1864.

DE LA HACIENDA DE SANTA ROSA DE LIMA A MAPIMÍ

Benito Juárez, tomó la decisión de partir de la Hacienda de Santa Rosa de Lima (hoy Gómez Palacio) rumbo a Mapimí, el 7 de septiembre de 1864. La carroza presidencial y su trashumante pasajero, iniciaron la marcha luego de despedirse de los habitantes de la hacienda quienes los tuvieron de huéspedes por tres días, los esperaba un camino de brecha en el que continuamente los viajeros eran atacados por los indios indómitos de la región, además de los bandidos que los asolaban en todo el territorio nacional. Éstos, también eran conocidos como "los plateados", porque usaban adornos de plata en sus ropajes. (México a Través de los Siglos. Autor: Vicente Riva Palacio. Tomo XVI, página 76. Edición de Editorial Cumbre, S.A. México. 1984).

En los amenos pasajes narrativos de sus novelas, Ignacio Manuel Altamirano y Manuel Payno, nos relatan las fechorías de estos forajidos del hampa decimonónica, temidos asaltantes de diligencias y de cuantos jinetes desventurados cayeran en sus manos. En el caso de la Comarca Lagunera, era preferible tener un encuentro con estos bandidos, y no perder la vida en un ataque de la sanguinaria indiada.

Juárez, desde su negra calesa divisaría en su trayecto a Mapimí la Sierra del Sarnoso con sus grandiosos picachos de Acatita y La Tinaja, y al llegar a la población, sus ojos admiraron el imponente Cerro de la India Dormida que tiene el bello perfil de una mujer, rostro inmerso en el infinito sueño de los siglos y del que se han hilvanado fantásticas leyendas que arroban la imaginación. (Geografía de Durango. Autor: Pastor Rouaix. Primera edición. Impreso por Talleres Gráficos de la Secretaría de Agricultura y Fomento. México 1929).

LOS DÍAS DE JUÁREZ EN MAPIMÍ

A esta antiquísima población, conocida en los tiempos de la Nueva España como Real de Minas de Santiago Apóstol de Mapimí, llegó un Benito Juárez arrastrando una balumba de preocupaciones al constatar las duras condiciones de vida en que vivían los habitantes de las comunidad coahuilense de San José de Matamoros (hoy Matamoros).

Juárez y sus ministros, fueron hospedados en una casa grande de dos pisos ubicada por la calle Zaragoza, la que aún podemos apreciar a media cuadra de la iglesia de Santiago Apóstol y que es sede del Museo Juárez, era una de las mejores casonas de la época; el inmueble, fue propiedad de la familia Cigarroa.

La antigua finca luce sobrios marcos de cantera en sus ventanas, canales y puertas, herrería forjada en sus grandes ventanales, además de corredores en sus dos pisos que circundan su patio central, es una construcción que luce la arquitectura que predominó en nuestro país durante el siglo XIX. El vetusto edificio, durante los días que lo habitaron Juárez, sus ministros y sus asesores militares, sería sede de los supremos poderes de la nación.

Mapimí, desde el México virreinal y en los días que la visitó el principal defensor de las Leyes de Reforma, era una población que desbordaba prosperidad por su riqueza minera y su fama ya había dado la vuelta al mundo, situación que atrajo la inmigración de extranjeros de espíritu aventurero en busca de fortuna; principalmente, europeos y norteamericanos.

Juárez, acompañado de sus ministros Sebastián Lerdo de Tejada, José María Iglesias y Guillermo Prieto, custodiados por el Batallón de Guanajuato, llegaron a Mapimí durante la tarde del 7 de septiembre de 1864; su estancia sería por unos días, el 13 del mismo mes, saldrían con rumbo a Nazas transitando por las haciendas La Goma, La Loma y La Noria de Pedriceña.

El CASO DE LOS MATAMORENSES

A su paso por la la población de San José de Matamoros, los lugareños se quejaron ante Juárez del maltrato que sufrían departe del terrateniente de origen vasco Leonardo Zuloaga Olivares, propietario de la hacienda de Hornos, cercana a Viesca.

Los matamorenses se habían asentado en un sitio del que alegaban eran tierras ociosas, sobre las cuales también reclamaba derechos Zuloaga, disputa que los llevó a discusiones acaloradas y enfrentamientos muy violentos con saldo de muertos. Zuloaga, quiso desalojarlos por la fuerza de los citados predios, mediante pistoleros que procedieron a ejecutar sus deseos; los pobladores, opusieron feroz resistencia y causaron bajas entre los sicarios del terrateniente.

Toribio Regalado fue empleado de Leonardo Zuloaga, matón contratable y asesino a sangre fría. El patibulario Regalado persiguió, torturó y asesinó a varios de los custodios del Archivo General de la Nación que se ocultó en la Cueva del Tabaco. La documentación fue escondida y vigilada por los matamorenses desde el verano de 1864, durante tres años, hasta que fue entregada al presidente Juárez en San Luis Potosí, en 1867.

Juárez, durante su estancia en Viesca, resolvió dar garantías y seguridad a los habitantes de Matamoros en la tenencia de las tierras que ocupaban, consecuentemente, expidió un decreto dotándolos de las mismas el 28 de agosto de 1864. Y en Mapimí, el 8 de septiembre del citado año, elevó a la categoría de villa a dicha población conocida hasta entonces como San José de Matamoros, la que en lo sucesivo ostentaría el nombre de Villa de la Laguna de Matamoros. (Coahuila a Través de sus Municipios. Capítulo: Matamoros de la Laguna, página 181. Autor: Gildardo Contreras Palacios. Edición del Gobierno del Estado de Coahuila. 2013).

El decreto de dotación de tierras a favor de los matamorenses, expedido por Juárez, muestra el perfil del estadista humanitario conmovido por las carencias de sus gobernados.

EL CASO DE LOS LERDENSES

Lo que hoy es Ciudad Lerdo, en sus inicios, fue la hacienda de San Fernando. Este latifundio era propiedad del terrateniente Juan Nepomueno Flores Alcalde, uno de los hombres más ricos e influyentes en el Estado de Durango, durante la segunda mitad del siglo XIX.

Católico a ultranza, fue adicto al Partido Conservador y al Imperio de Maximiliano, apoyó abiertamente al ejército de Napoleón III cuando ocupó el territorio duranguense. Sus tropas estuvieron acantonadas en su hacienda La Floreña, antes Villa Juárez (hoy Ciudad Juárez), en la Comarca Lagunera. Ahí acamparon los pintorescos zuavos, soldados franceses que usaban pantalones bombachos, una faja de lana blanca, sombrero tipo fez con una borla y polainas; los aguerridos zuavos, fueron el orgullo del ejército invasor en las batallas de Sebastopol, Magenta y Solferino en Crimea e Italia.

Durante su estancia en la hacienda de Santa Rosa de Lima, un grupo de habitantes de la hacienda de San Fernando, encabezados por Catarino Navarro Urías, se presentaron ante Juárez solicitándole que elevara a la categoría de villa a la ya mencionada hacienda de San Fernando.

Y como sucedió con los matamorenses, Juárez hizo lo mismo con los lerdenses en Mapimí, ordenó el referido día 8 de septiembre de 1864 otro decreto más donde acordaba que la pequeña comunidad de San Fernando, en lo sucesivo y con el rango solicitado por sus habitantes, llevaría el nombre de Villa Lerdo de Tejada. Esta nueva denominación honraría la personalidad de su desaparecido amigo y colaborador Miguel Lerdo de Tejada, autor de la Ley Lerdo, disposición jurídica que ordenaba la desamortización de los bienes eclesiásticos. O sea, la venta de los bienes inmuebles del clero en su mayoría inactivos, para diversificar el número de sus propietarios y hacerlos productivos; Miguel, era hermano mayor de Sebastián Lerdo de Tejada, quien acompañó a Juárez durante el ajetreado éxodo de la república itinerante. (Durango, Tierra de Retos. Publicación de Grupo Editorial Milenio. Capitulo: De la Vida Independiente al Porfiriato, página 50 Autor: Roberto Martínez García. Editado por Quebecor en Colombia. 2009).

Por referencias de algunos historiadores como Amado Illarramendi y Jesús Vargas Garza, el documento que firmó Juárez se extravió y no fue publicado en el periódico oficial del estado de Durango, porque la capital se encontraba ocupada por el ejército francés. Seguramente, cuando Juárez regresaba triunfante a la ciudad de México y llegó a Durango, en diciembre de 1866, nombró al general Francisco Ortiz de Zárate gobernador de la entidad y le daría instrucciones de que regularizara la vida jurídica de la comunidad lerdense.

Ortiz de Zárate, procedería después a redactar el decreto correspondiente con fecha 24 de junio de 1867, ordenamiento legal que firmó y ratificaba lo dispuesto por el presidente Juárez, en Mapimí, el 8 de septiembre de 1864, en el que se acordaba el cambio de nombre del poblado y su elevación al rango de villa.

[email protected]

En Mapimí, hace 150 años, Juárez dio rango de villas a Lerdo y Matamoros.
En Mapimí, hace 150 años, Juárez dio rango de villas a Lerdo y Matamoros.
Los zuavos, como el de la gráfica, transitaron los caminos de la Comarca Lagunera.
Los zuavos, como el de la gráfica, transitaron los caminos de la Comarca Lagunera.

Leer más de Torreón

Escrito en: Mapimí juarez en mapimi

Noticias relacionadas

Siglo Plus

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Casa que habitó el Presidente Juárez, en Mapimí, en septiembre de 1864.

Clasificados

ID: 1035087

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx