La decisión de las autoridades estadounidenses de imponer un arancel al azúcar mexicana fue tomada de manera unilateral y sin realizar una investigación seria y formal, consideró el senador panista Francisco Domínguez Servién.
Esta sanción rompe el compromiso original del Tratado de Libre Comercio de no gravar este producto, ya que el impuesto resta la competitividad a los productos mexicanos que se han esforzado en la zafra mexicana.
El integrante de la Comisión de Agricultura y Ganadería advirtió que esta postura de las autoridades norteamericanas podría afectar la relación comercial entre ambos países.
En conferencia de prensa en el marco de la reunión plenaria del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional (PAN), externo que esto representa un trato desigual y no de competencia.
Además, perjudicará de manera directa no sólo a los azucareros de este país, sino también a muchas cadenas productivas que dependen de este endulzante.
Recordó que en un tratado de libre comercio el intercambio comercial debe ser totalmente abierto y Estados Unidos debe honrar sus compromisos con México, como lo ha honrado durante todo el proceso de este acuerdo, ya que la decisión de gravar las exportaciones de azúcar mexicana fue tomada de manera unilateral.
Las principales consecuencias de esta medida, insistió, será el desplome de los precios del endulzante en el mercado nacional, la pérdida de empleos y se restaría competitividad importante a esta industria.
Por ello, exhortó a la Secretaría de Economía a defender a los azucareros mexicanos y que se impongan los acuerdos aprobados desde 1994.
