Según las mamás, desde hace más de cinco años, los maestros que son asignados para impartir las clases a sus hijos, son destituidos cada tres meses con el argumento de que ya se van a “jubilar”. (El Siglo de Torreón)
Cuarenta y dos niños se quedaron sin clases el día de ayer. Son alumnos de primero y sexto grado que pertenecen a la escuela primaria Francisco Villa que se localiza en el ejido Luján y que sin aviso alguno perdieron a sus profesores. “Los niños llegaron llorando a la casa que porque ya no tenían maestro, pero a nosotras nunca nos avisaron nada”, comentó una de las 42 madres de familia que ayer se manifestaron en las instalaciones de la Subsecretaría de Educación Pública en la región de Gómez Palacio para exigir la reincorporación de los catedráticos.
Según las mamás, desde hace más de cinco años, los maestros que son asignados para impartir las clases a sus hijos, son destituidos cada tres meses con el argumento de que ya se van a “jubilar”. Además, aseguran que las clases fueron suspendidas, debido a que los salones estaban por debajo de los 25 niños que se deben de matricular en las aulas.
Por otra parte, fueron atendidas por la maestra Idalia Romo que pertenece a la Coordinación de Educación Primaria de la Subsecretaría. Ahí, les comentaron a las inconformes que no se “demerita” la cantidad de alumnos en el salón de clases, pero que por medio de la gente de planeación, de jefes de sector y de supervisión, se estaría llevando a cabo una revisión de estructura para que la cantidad de niños justifique a los maestros.