Crisis. Las tomas clandestinas son un riesgo incontrolable para Pemex, que día a día descubre más.
Técnicos de Petróleos Mexicanos controlaron un ligero derrame de gasolina, provocado por una toma clandestina instalada en el poliducto Cadereyta-Reynosa-Matamoros, en el municipio de Reynosa.
El jefe de Información y Relaciones Públicas del distrito Reynosa de la paraestatal, Eloy Olivares Bocanegra, agregó que como medida preventiva, personal de Pemex cerró las válvulas para cortar el flujo del combustible y luego procedió a la reparación del tramo del ducto afectado por la toma.
Dijo que el área jurídica de Petróleos Mexicanos tomó conocimiento de los hechos y presentó la denuncia respectiva ante el Ministerio Público Federal, para efectuar las averiguaciones correspondientes y deslindar responsabilidades.
Subrayó que los esfuerzos internos, guiados por el Programa Integral de Combate al Mercado ilícito y la coordinación con otras dependencias federales para proteger la red nacional de ductos y las instalaciones, ha permitido a Pemex detectar de forma oportuna este tipo de acciones ilícitas, que llegan a poner en riesgo a la población.
