Cultura

Las Palabras Tienen la Palabra

El gatito del Presidente

Juan Recaredo

Siendo presidente de los Estados Unidos, Calvin Coolidge ofreció una cena en la Casa Blanca a un grupo de campesinos. Cada uno de los invitados se sentía ahora sí que “como gallo en corral ajeno” y no sabiendo cómo comportarse, cada uno por su cuenta decidió imitar los movimientos que hiciera el presidente.

Por eso cuando Coolidge vació la mitad de su café en un plato, los invitados hicieron lo mismo. Le agregó crema y azúcar y los invitados hicieron lo mismo. Luego el presidente puso el plato en el suelo para que bebiera su gato y… los invitados ya no supieron qué hacer.

Simpática anécdota ¿no? Sí, pero definamos ¿qué es una anécdota? Una anécdota -o una anacedota como decía el ranchero…- es un relato breve de algún hecho interesante… y yo le agregaría el calificativo de divertido, porque esa es la idea que nosotros tenemos de lo anecdótico, que es breve, interesante y desde luego divertido, aunque debo aclarar que lo divertido no quiere decir que necesariamente tenga qué ser algo chistoso.

¿Ha visto usted alguna vez un tiburón parado? Me refiero a “parado” como sinónimo de inmóvil y no a que vaya a estar el tiburón de pie. Repito ¿ha visto alguna vez un tiburón parado? ¿No, verdad? y espero que tampoco lo haya visto en movimiento porque eso significaría “peligro inminente”.

Estando frente a un tiburón parado, es muy probable que no hubiera peligro alguno porque el tiburón estaría muerto. La mayoría de los tiburones nada sin detenerse desde que nace hasta que muere, porque su aparato respiratorio no tiene un órgano que bombee el oxígeno dentro de su cuerpo, sino que circula por el constante movimiento hacia adelante que el tiburón realiza dentro del agua.

Esto que le cuento no es precisamente una anécdota porque no es un hecho peculiar específico. Más bien yo lo consideraría un hecho insólito… ¿y qué es lo insólito?

La expresión “hecho insólito” da la impresión de que se llama así porque es un hecho que ocurre solito, pero el origen de la palabra “insólito” más bien debemos ubicarlo en que es algo que “no suele suceder”, que no es costumbre que suceda. Y es que ciertamente no es muy frecuente que un animal se tenga que estar moviendo para poder vivir, y que si se queda inmóvil se muera. ¿Insólito, verdad?

¡Claro! Como insólito es el hecho de que el personaje más típico del arte popular argentino, no era argentino. Se llamaba Charles Romuland Gardes, pero artísticamente la gente lo conocía y lo conoce como “Carlos Gardel”.

Aparentemente nació el 10 u 11 de diciembre de 1890 o quizá de 1887, e incluso puede ser que unos años antes, muy probablemente en Toulouse, Francia, aunque algunos datos hacen suponer que fue en Tacuarembó, Uruguay. Su niñez se desarrolló en barrio del Abasto en Buenos Aires. Adoptó la ciudadanía argentina en 1923. De todas maneras cuando le preguntaban contestaba: “soy rioplatense, como el tango”.

PREGUNTA DEL PÚBLICO:

W. Molina. Licenciado en castellano y literatura: ¿Cómo es la presidente o la presidenta? Ya déjense de tonterías. Presidente es participio activo del verbo presidir. Decir la presidenta es como decir la cantanta. Lo correcto es “la presidente”.

RESPUESTA:

No es una tontería, es una disposición de la Real Academia Española en consenso con las 22 academias del mundo de habla hispana. Lo correcto gramaticalmente es “la presidente”, pero por ser costumbre arraigada se acepta “la presidenta”.

El matrimonio es el único caso de lucha, en la que duermes con el enemigo. ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.

Leer más de Cultura

Escrito en:

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Cultura

TE PUEDE INTERESAR

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1030942

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx