El poeta, escritor, novelista y catedrático mexicano Rafael Delgado, a quien se recuerda hoy que se cumplen 161 años de su nacimiento, es considerado uno de los más destacados narradores decimonónicos.
Autor de “Angelina” (1895), "Los parientes ricos” (1903) y “Una historia vulgar” (1904), supo plasmar en su obra los singulares ambientes provincianos.
Rafael Delgado vino al mundo el 20 de agosto de 1853, en Córdoba, Veracruz, en el seno de un hogar liderado por Pedro Delgado y María de Jesús Sáinz, personas educadas, católicas y con ideas conservadoras, que tras el crecimiento de movimiento liberal en Córdoba se trasladaron a Orizaba.
La mayor parte de su vida transcurrió en esta ciudad, donde su familia quedó arruinada a mediados del siglo XIX, cuando la lucha entre liberales y conservadores provocó una profunda inestabilidad política y económica.
Autor realista y costumbrista plasmó las pugnas entre liberales masones y católicos conservadores, así como las diferencias entre los ricos porfiristas y la clase media, ejemplo de ello es su novela "Los parientes ricos".
De acuerdo con la biografía del escritor disponible en el portal en Internet “portal.veracruz.gob.mx”, educado en Orizaba, Delgado dominó el inglés, el francés e el italiano y a través de la literatura conoció a los más grandes escritores europeos.
Cursó la preparatoria y la carrera de profesor en el Colegio Nacional de Orizaba, de donde fue catedrático de Literatura e Historia durante 18 años.
En 1884, el joven talento se trasladó a la Ciudad de México, donde continuó su formación como escritor y posteriormente fue nombrado miembro de la Real Academia de la Lengua Española. Sin embargo, su precaria situación económica lo obligó a regresar a Orizaba, donde volvió a dictar cátedras.
Invitado por el entonces gobernador de Jalisco, José López Portillo y Rojas, Rafael Delgado fue director del departamento de Educación de aquel estado, puesto en que permaneció sólo un tiempo, pues la artritis que padecía lo obligó a regresar a Orizaba.
Aunque en su juventud fue un hombre atractivo, nunca contrajo matrimonio, por lo que sus siguientes años los pasó en soledad. Su muerte ocurrió el 20 de mayo de 1914.
