¡Que no cunda el pánico!

Ya sobreviviste los 9 meses del embarazo, la odisea del parto y ahora tienes en tus brazos a tu primer bebé, pero ¿y ahora qué hacer? ¿Por qué no tienes la sabiduría de tu madre o abuela? Los bebés no vienen con un manual bajo el brazo y las parejas se pueden abrumar ante la obligación de darle lo mejor al recién nacido y no fallar en el intento. En Doctor en Casa te damos 25 de los consejos más prácticos para que cualquier padre primerizo se vuelva todo un experto.

Manipulación

1. Muchos padres se sienten intimidados ante la fragilidad de un recién nacido. La clave para moverlo de manera correcta está en siempre (¡ojo, siempre!) sostener su cabeza y cuello, ya que sus músculos no son lo suficientemente fuertes para sostenerse por sí mismos y mucho menos si se hacen movimientos bruscos.

2. Al cargarlo debes inclinarte hacia él, para disminuir la distancia que se forma antes de que el cuerpo del pequeño entre en contacto contigo, así le generas seguridad para que no llore y los riegos de tirarlo por tu nerviosismo son reducidos.

3. Aunque es un alivio tener un relevo para cargar al pequeño, procura que cada persona que vaya a tenerlo en sus brazos esté limpia y se haya lavado las manos. El sistema inmunológico de un bebé no esta completamente desarrollado, por lo que son más propensos a contraer enfermedades.

Llanto

4. El llanto es la única manera que tiene el bebé para expresarse. Por esto, prepárate porque entre las primeras seis y ocho semanas va a ser el ruido más habitual que escucharás. Un recién nacido llora en promedio tres horas al día (aunque muchos lloran todavía más) al tener hambre, frio, sentirse solo, cansado, irritado, etc. Un masaje, arrullarlo, un chupón o ponerle música o sonidos rítmicos ayudarán a calmarlo.

5. Es importante distinguir un llanto de necesidades fisiológicas a uno por dolor o enfermedad. El segundo es mucho más intenso y tiene un ritmo diferente, se puede percibir un verdadero dolor, además la actitud del pequeño es más apagada y débil.

Alimentación

6. Los recién nacidos tienen el estómago muy pequeñito, por lo tanto la cantidad de leche que les cabe es también pequeña. No guíes la lactancia por horarios, lo mejor es darla cada vez que el bebé la pida. Procura que la areola de tu pecho también esté dentro de la boca del pequeño, así extraerá la mayor cantidad de leche posible.

7. La leche materna siempre será mucho mejor para el recién nacido, trata de sustituirla por leche artificial sólo en casos extremos y no por comodidad. Los anticuerpos maternos no pueden ser reproducidos en la leche artificial.

8. Si el bebé tiene que tomar por biberón, este tiene que estar completamente esterilizado. Para evitar que ingiera aire, esta botella especial para él debe de tener cierta inclinación para que la leche ocupe todo el espacio y no haya burbujas de aire que pueda tragar por accidente.

Regurgitación, cólicos y gases

9. Es casi inevitable que el bebé no ingiera aire al alimentarse, pequeñas palmadas en la espalda ayudarán a que expulse gases que le provoquen malestar. Un padre puede ser un poco brusco, por lo que un masaje es una mejor opción.

10. Para aliviar cólicos lo ideal es sostenerlo boca abajo acostado sobre tu brazo y sostenerle la cabeza con una mano.

11. No te asustes, tu bebé no esta vomitando. La regurgitación es algo muy común en los recién nacidos y se debe a la falta de madurez de la válvula que cierra el paso a la comida, con el tiempo desaparece (siempre y cuando no se trata de una enfermedad pro reflujo) y solo hay que estar al pendiente para limpiarlo inmediatamente.

Cordón umbilical

12. El cordón umbilical se cae aproximadamente después de quince días, se tiene que mantener seco para que su desprendimiento sea más rápido y evitar infecciones. No trates de arrancarlo aunque este apunto de caerse, ya que puedes causar una hemorragia.

13. Mientras esté presente y durante los días de cicatrización después de su caída, es necesario mantener ventilado el vientre del bebé. No fajes el ombligo con ropa, pañal o vendas; vendar al pequeño no sirve para evitar que “se bote” su ombligo, en cambio, puede causar una infección.

Baño

14. Aún no es necesario bañar al pequeño diariamente, los bebés no sudan como un adulto ni se ensucian como un niño. Puedes esperar a que se haya caído el cordón umbilical o limpiarlo usando toallitas húmedas.

15. Antes de bañarlo hay que tener preparado lo que vas a necesitar, jabón, champú, toalla, crema, pañal, ropa, etc. Los bebés son muy sensibles y no queremos que pasen frio o que los descuides por ir a buscar la toalla que se te olvidó.

16. Al bañarlo y secarlo no es necesario frotar, basta con aplicar presión con la esponja o la toalla ya que la piel del bebé es extremadamente sensible a la fricción. E probable que al terminar necesites aplicarle una crema hidratante.

Cambio de ropa

17. Evita los trajes ajustados o muy complejos por más lindos que se vean. Lo mejor es usar ropa que le quede holgada, no le genere calor y sea fácil de quitar y poner para evitar “mallugar” al pequeño.

18. Durante los primeros meses, es imprescindible lavar su ropa, cobijas y accesorios separados de la ropa de los demás, con un jabón neutro y sin suavizantes.

19. Viste al bebé siempre con una prenda más de la que tú usarías en este momento, tanto en invierno como en verano, sin embargo, tampoco te pases y lo sofoques.

Cambio de pañales

20. Durante las primeras 48 horas del bebé el pequeño expulsará una materia fecal muy particular, viscosa, de color extraño y de muy mal olor, esto se llama meconio y es un proceso normal en el bebé. Prepárate para no embarrar todo al limpiarlo.

21. Los bebés son verdaderas máquinas de ensuciar pañales, deberás cambiarlo con bastante frecuencia, antes y después de comer, al despertar e ir a dormir y cuando se necesite. Aunque cada bebé es diferente, en promedio un pañal se debe cambiar unas ocho veces al día.

22. Para evitar infecciones en el área genital por las bacterias fecales (sobre todo en las niñas) siempre se debe limpiar de delante hacia atrás.

23. Durante las primersa semanas, el tubo digestivo del bebé no posee la fuerza necesaria para expulsar las heces, de modo que tiene que hacer un esfuerzo y por eso el pequeño se pone colorado. Algunos ejercicios, como acostar al bebé y doblar sus piernitas plegándolas sobre su cuerpo o flexionarlas de una en una, simulando pedalear, ayudan al niño a expulsar todo.

Dormir

24. La postura ideal para acostar a un bebé es boca arriba. Es la más segura y hará que los gases le molesten en menor medida. Las asociaciones de pediatría lo recomiendan para evitar la muerte súbita.

25. Los bebés no duermen toda la noche, lo hacen por un promedio de 16 horas repartidas en períodos de tres a cuatro horas. No hay nada que puedas hacer para evitar desvelarte durante los primeros meses, sólo esperar a que tu bebé sincronice sus horarios.

¡Suerte!

¿Estás listo para recibir a tu bebé en casa?

Checa esta lista sobre todo lo que tienes que tener en cuenta para darle la mejor bienvenida a tu bebé.

Dormitorio.- Una cuna con colchón firme, moisés, sábanas, cobijas, pañalera y un porta bebé para el automóvil.

Accesorios.-Jabón neutro, champú que no irrite los ojos, paquetes de pañales, toallitas húmedas, chupón, termómetro infantil, etcétera.

Comida.- Tener más de un biberón, repuestos para las tetillas, equipo esterilizador y suficientes latas de leche. No descuides tu alimentación ni la de tu pareja, el refrigerador también debe estar lleno de comida saludable.

Repuestos.- De todo lo anterior siempre hay que tener repuestos, primero porque el pequeño come y crece a un ritmo acelerado y segundo por que las prisas e inexperiencia pueden hacer que se pierdan o rompan algunas cosas.

Lista de teléfonos a la mano.- Los números de tu doctor, familiares y expertos deben de estar siempre a la mano. Hay momentos donde puede ganar el pánico y lo mejor es apoyarse en alguien más.

Documentación.- Ten siempre a la vista  los papeles que necesitarás para registrar al pequeño y realizar los primeros trámites.

6 errores frecuentes de padres primerizos que debes evitar.

1.- Angustiarse por cualquier motivo/llanto.

2.- Creer que el bebé se alimentará y tendrá las mismas necesidades siempre.

3.- No salir de la casa o salir a lugares muy concurridos.

4.- No planear horarios y desvelarse.

5.- Pelear frente al bebé e ignorar a la pareja.

6.- Escuchar y hacer caso de todas las opiniones de terceros.

FUENTES: www.bebesencamino.com; www.kidshealth.org; www.efesalud.com