En términos de impresión, se les llama caracteres a las letras y cuando lo sabe uno inmediatamente se pregunta ¿qué relación puede haber entre las letras impresas y el temperamento de una persona? Eso es lo que uno se pregunta y no se contesta porque si supiera la respuesta entonces ¿para qué se iba a andar preguntando?
La palabra carácter viene del griego kharakter que es una marca que se graba, un hierro de marcar reses, es hacer surcos o grabar algo en general. El carácter –si me permite usted la redundancia- es lo que caracteriza a una persona, es su marca personal que la hace distinguirse de los demás, como le pasa a una vaca –sin afán de ofender- cuando le ponen el hierro cande diferente que le va a dejar una marca para evitar que se confunda con sus congéneres.
Ahí ya podemos ir entendiendo que las letras en la imprenta son marcas y el carácter es también la marca de la persona. Aquí es donde debe usted decir ¡Ah, ya caigo…!
Además carácter es una de las pocas palabras que existen en nuestro idioma que en plural y en singular tienen diferente acentuación: carááácter y caracteeeeres. Como rééégimen y regííímenes o espééécimen y especííímenes.
Ahora fíjese en esta otra palabra: convicción. La convicción es una idea a la que se está fuertemente adherido. De convicción surge el verbo convencer que es eso: con-vencer, es decir, vencer del todo, triunfar, que es lo mismo que abatir o confundir al adversario.
Entonces la convicción se adquiere cuando se puede demostrar algo defintivamente. Estoy convencido de que Dios existe, es como decir, estoy seguro de que mi idea es real, es cierta y al que quiera que se lo pruebe se lo demuestro, que es como decir: al que quiera discutir conmigo, al que quiera competir contra mí en demostrar esa idea, le voy a ganar.
A lo que tenemos qué llegar entonces es a concluir que para conocer los orígenes de las palabras también hay qué tener una buena dosis de imaginación.
La palabra comadreja por ejemplo indica un mamífero muy dañino, un animalito que nadie aguanta y se le llama comadreja precisamente porque es como una de esas comadres latosas a las que nadie soporta.
Como esa comadre que usted tiene y en la que está ahora pensando…¿verdad que sí? Es una comadreja.
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PREGUNTA DEL PÚBLICO
Mi abuelo decía que yo era muy melindrosa, pero nunca me quiso decir qué ignifica eso? ¿Usted podría aclarar mi duda? Cristina Benavides.
RESPUESTA
Una persona melindrosa es excesivamente delicada o afectada.
Frase contradictoria para terminar: Me molesta mucho la gente que no da la cara. Anónimo… ¿Cómo dijo? LAS PALABRAS TIENEN LA PALABRA.
