El Centro de Derechos Humanos José María Morelos y Pavón y organizaciones guerrerenses defensoras de derechos humanos condenaron el asesinato del periodista y vocero de Salud Municipal de Acapulco, Jorge Torres Palacios, y se sumaron a la exigencia de justicia en torno al caso, a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Además, en Acapulco, integrantes de la oficina en México del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos abrió un expediente para iniciar las investigaciones sobre el caso.
El Colectivo Contra la Tortura y la Impunidad, lamentó que el asesinato de Jorge Torres provoca indignación en la sociedad y más entre los periodistas. Reprobó que hay casos semejantes de privación ilegal de la libertad de personas de grupos con poder económico o político sean atendidos por las autoridades de procuración de justicia, de forma expedita y con la debida eficacia y se logre su regreso sanos y salvos, mientras que otros, como el de Jorge Torres, la familia viva en la incertidumbre durante cuatro días y solo les sea entregado el cuerpo inerte de su ser querido.
México y en particular Guerrero, se mantienen en la lista de lugares más inseguros para los profesionales de la comunicación: periodistas, reporteros, fotógrafos, camarógrafos, etc. Y prácticamente todos los atentados contra periodistas están impunes”, agregaron en un comunicado las organizaciones defensoras de derechos humanos.
Exigieron que autoridades civiles de procuración de justicia realicen una investigación real, científica, expedita, eficaz y oportuna; además, pidieron que las investigaciones consideren a la víctima como periodista y por tanto que también la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).
En el puerto, Pilar Sanmartín, oficial de la Unidad de Observación del Alto Comisionado de la ONU, se reunió con una comisión de periodistas y con el fiscal regional de la PGJE en esa ciudad, para hablar de la investigación.
