En la planeación que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) realizó hacia 2027, se contempla la construcción de dos nuevas centrales nucleoeléctricas con tecnologías de nueva generación limpia (NGL) que entrarían hacia finales del período.
Estas centrales fueron etiquetadas como Oriental I y II y Oriental III y IV con capacidad conjunta de dos mil 800 megawatts (MW) y tentativamente se construirían, según el Programa de Obras e Inversiones del Sector Eléctrico 2013-2017, cerca del complejo de Laguna Verde.
Las autoridades del sector parten de la base de que el desarrollo de este tipo de centrales ha mejorado sustancialmente la seguridad en su operación en los últimos años y que además ayudarían a alcanzar el objetivo trazado en la Ley para el Aprovechamiento de las Energías Renovables y el Financiamiento de la Transición Energética (LAERFTE), de incrementar la participación de la generación con fuentes no fósiles con energías renovables a 35% en 2027.
En México sólo opera una central de este tipo: Laguna Verde que da 3.3% de la generación total.
Aunque en la prospectiva no se definen montos de inversión para estas centrales, en el rubro de requerimientos de inversión se considera un primer desembolso de 4 mil 99 millones de pesos en 2020, con el esquema financiero Obra Pública Financiada a proyectos de NGL.
Acorde a los posibles requerimientos de uranio que demandarían, el Servicio Geológico Mexicano prevé concluir este año la exploración y evaluación de localidades como Los Amoles en Sonora; La Coma en Nuevo León; y, Peña Blanca en Chihuahua para determinar el potencial del mineral radioactivo.
