En el debate de las leyes secundarias de la reforma energética son bienvenidas las voces discordantes, pero es momento de detener a quienes sin calidad moral buscan descalificar el proceso, aseguró el coordinador del Partido Verde en la Cámara de Diputados, Arturo Escobar y Vega.
Lamentó las voces que quieren que México se mantenga en estado de pausa, para que les persista un discurso político de choque, de corriente, que no construye y no ve para adelante.
Por ejemplo, dijo, las descalificaciones de la senadora Dolores Padierna al secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, no hacen un debate serio, sino que buscan descalificar con nimiedades “a uno de los grandes caballeros del servicio público mexicano”, subrayó.
En entrevista con Notimex, el legislador del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) enfatizó que se trata de voces que con irresponsabilidad absoluta, buscan juzgar a un funcionario porque tiene acciones en cuatro gasolineras desde hace años.
“Es la cara más clara de aquellos que quieren que México no avance, que no crezca y se mantengan una parálisis”, consideró.
“Queremos un debate de fondo sobre los temas de la reforma, no distractores para golpetear a un hombre de cabal moralidad como Joaquín Coldwell”, enfatizó.
Para Escobar y Vega, se trata de un golpeteo fácil, pues una cosa es tener voces informadas que cuestionen la reforma, pero otras es la pequeña calidad moral “de quienes han hecho de la extorsión política una forma de trabajo y un modus vivendi”, aseguró.
Por ello, el legislador llamó a un debate serio en torno a la legislación secundaria de la reforma energética, ya que su implementación será un parteaguas para el país.
Está en juego el futuro de México, con la reforma el país podrá producir gasolina y gas a precios muy competitivos, en especial para beneficio de sus ciudadanos.
La reforma, insistió, va a construir una nueva plataforma energética, con mayor contenido nacional, donde los precios de los energéticos van a ser absolutamente competitivos y el país saldrá adelante.
En su opinión, se busca desviar la atención de una reforma que tiene que ver con la distribución, almacenamiento, exploración, explotación de hidrocarburos, que hará que México de una vez por todas salga de esta simulación energética, en la cual hemos vivido pocos países.
Por ello, se pronunció por no confundir a los ciudadanos con debates que no son debates, sino simplemente “golpeteo corriente y baratito”.
