El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, a través de la Oficina de Control de Bienes de Extranjeros (OFAC), designó al mexicano Heriberto Zazueta Godoy (alias “Capi Beto”) por su apoyo material en las actividades de narcotráfico del cártel de Sinaloa y a uno de los líderes, Ismael Zambada García (alias "El Mayo"), de conformidad con la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Ley Kingpin).
"Además fueron designados otros dos individuos y tres empresas vinculadas a Zazueta Godoy. Como resultado de la acción de hoy, todos los bienes e intereses propiedad de estos individuos o empresas dentro de los Estados Unidos, o en posesión o control de ciudadanos estadounidenses quedan bloqueadas. A los ciudadanos estadounidenses les queda prohibido participar en actividades comerciales con ellos", informó la Embajada de EU en México en un comunicado.
Zazueta Godoy ha participado en el tráfico de narcóticos durante decenios y ahora es fugitivo con cargos criminales en los E.U. En febrero del 2014, él fue acusado de tráfico de drogas y lavado de dinero en el Distrito Norte de Illinois, junto con Zambada García. La acusación identifica a Zazueta Godoy como un líder de una célula del cártel de Sinaloa.
Zazueta Godoy ha transportado con éxito cantidades considerables de cocaína con destino a los Estados Unidos. En marzo de 2007, él ayudó a coordinar el transporte de 19 toneladas de cocaína a bordo de la embarcación de motor Gatún, la cual fue incautada en aguas internacionales frente a la costa de Panamá.
"Heriberto Godoy Zazueta ha estado transportando grandes cantidades de cocaína en alta mar para Zambada García y el cártel de Sinaloa durante años e incluso luego de haber sufrido la incautación de cocaína más grande de la historia en el 2007", comentó el Director de la OFAC, Adam J. Szubin. "La designación de hoy, es una combinación de los esfuerzos de nuestros asociados de la ley y el orden, y envía un mensaje claro que Estados Unidos continuará señalando y desmantelando esta violenta red de narcotráfico donde quiera que opere".
Zambada García y el cártel de Sinaloa fueron identificados como narcotraficantes extranjeros conforme a la Ley Kingpin en 2002 y 2009, respectivamente. Zambada García está acusado a nivel federal por cargos de narcotráfico en varios tribunales de Distrito de los Estados Unidos, y aún permanece fugitivo. El programa de Recompensas de Narcóticos del Departamento de Estado ofrece una recompensa de hasta cinco millones de dólares por información que conduzca a su arresto y/o condena.
La acción de hoy también incluye a dos familiares de Zazueta Godoy, que actúan en su nombre. Su tío, Leopoldo Gómez Zazueta, y su cuñado, Demetrio Romero Zevada, han desempeñado un papel importante en las empresas controladas por Zazueta Godoy por más de una década. Las empresas son designadas hoy porque son propiedad de o están controladas por Zazueta Godoy, dos de ellas tienen sede en Mazatlán: la empresa de mariscos, Comercializadora y Frigoríficos de la Perla del Pacífico, y la empresa de pesca, Producción Pesquera Doña Mariela; y un restaurante localizado en Guadalajara, Jalisco, Taipén, S.A. de C.V.
La designación de hoy se llevó a cabo en estrecha coordinación con la Oficina del Fiscal de E.U. para el Distrito Norte de Illinois y la Agencia para el Control de Drogas (DEA). Esta acción forma parte de un gran esfuerzo para sancionar a las organizaciones mexicanas de tráfico de drogas en colaboración con las autoridades de México.
Desde junio de 2000 más de mil 500 individuos y entidades han sido designados de conformidad con la Ley Kingpin por su papel en el tráfico internacional de estupefacientes. Las sanciones por violaciones a la Ley de Cabecillas fluctúan entre penas civiles de hasta mil 75 millones de dólares por cada violación y penas criminales más severas. El castigo para directivos de empresas puede ser de hasta 30 años de prisión y multas de hasta cinco millones de dólares. Las multas criminales para empresas pueden alcanzar los 10 millones de dólares. Otros individuos pueden enfrentar hasta 10 años de prisión y multas por violación criminal de la Ley Kingpin de conformidad con el Título 18 del Código de Estados Unidos.
