La noche de ayer jueves se registró un nuevo enfrentamiento en el municipio de Jiquilpan, el cual dejó como resultado cuatro hombres muertos, entre los que se cuenta un ex policía municipal de este lugar.
Este es el segundo enfrentamiento que ocurre en menos de 48 horas, presumiblemente en lo que se vislumbra como una nueva disputa entre el cártel de “Jalisco Nueva Generación” y el de “Los Caballeros Templarios”, de Michoacán.
Fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado de Michoacán confirmaron, además, que al filo de la medianoche el enfrentamiento, que comenzó en el municipio de Jiquilpan cerca de las 21 horas, se extendió al municipio de Sahuayo, colindante con el estado de Jalisco.
De acuerdo a los reportes preliminares, el fuego cruzado comenzó alrededor de las 22:00 horas en el bar K-ONE, ubicado en el municipio de Jiquilpan, a un costado de la carretera que conduce a esta localidad, con San José de Gracia-Manzanillo.
Ahí, un comando armado entro al bar, al parecer en busca de dos personas, uno de ellos ex policía municipal, quienes al ver a los hombres armados trataron de huir pero fueron alcanzados por balas de armas de asalto y quedaron muertas antes de escapar.
Los agresores huyeron a bordo de una camioneta.
Este hecho provocó que otro comando armado se movilizará en busca de los asesinos del bar, quienes al parecer fueron encontrados también sin vida en una de las avenidas principales de la localidad.
Elementos del Ejército Mexicano se movilizó por la zona del fuego cruzado, lo que provoco la dispersión de los delincuentes, aunque más tarde fueron encontrados dos personas muertas sobre la Avenida Circunvalación y la calle David Franco Rodríguez del municipio de Jiquilpan.
Horas más tarde fueron reportadas balaceras diversas sobre la carretera a Sahuayo en Jiquilpan yo y al menos dos personas más fallecidas.
Hasta esta madrugada, la Secretaría de Seguridad Pública ni la Procuraduría General de Justicia han emitido versión oficial sobre los hechos.
Con las personas fallecidas este jueves suman siete los muertos por enfrentamiento entre carteles rivales, en el marco de un programa de desarme que mantiene el gobierno federal en el estado de Michoacán.
