El centro y norte de México enfrentará un “stress hídrico“ debido al cambio climático y a los proyectos de extracción de gas shale, alertó hoy aquí la representante del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en este país, Dolores Barrientos Alemán.
En el marco del Congreso “Camino a la Sostenibilidad “ en la Universidad de Monterrey (UDEM), la especialista recomendó a las autoridades en esta materia que evalúen muy profundamente el impacto de la extracción del hidrocarburo y las implicaciones económicas para el país.
“En el caso de gas shale, nosotros tenemos estudios muy específicos del stress hídrico que algunas zonas del planeta van a vivir y están viviendo ya por lo efectos del cambio climático “, dijo.
Precisó que “una de las zonas de toda América Latina, México, el centro y el norte de México, van a estar viviendo un stress hídrico muy fuerte y coinciden las zonas, del norte de México, donde va ha haber una escasez física del agua “.
Esto, advirtió, “significa que aun y que los gobiernos tengan recursos financieros suficientes para extraer agua, ya no va ha haber agua, y coincide que el norte de México va a vivir esa situación “.
Refirió que la extracción de un gas como el gas shale va requerir más o menos 9 y 29 millones de litros cúbicos para explotar un pozo.
Para el caso de México, indicó, a la mejor se espera que se exploten 20 mil pozos que es más o menos la estadística que muchos especialistas prevén en estas regiones del país.
“Y si es una zona en donde ya no hay agua, entonces la decisión es una decisión económica, vamos a valorar todos los aspectos económicos y decir voy a desviar ese recurso que es muy poco”, expresó.
Mencionó que “lo que yo se es que Monterrey ya no tiene un suficiente abasto de agua y van a tener que traer agua de otros estados, para el consumo humano “.
Entonces, apuntó, “tienes que hacer una valoración económica y decir: o el agua que tenemos es para consumo humano o es para el sector agrícola, para el sector industrial, para que voy a distribuir esta agua es que es un recurso escaso “.
Subrayó: “Imagínense que costoso sería si en Nuevo León tienes gas shale, pero no tienes agua para explotarlo “.
Entonces, continuó, “se tendrían que utilizar otras tecnologías si quieres agua de más lejos y tecnologías más avanzadas si quieres hacer una explotación con aguas tratadas”.
Manifestó que “la explotación de gas shale requiere tecnologías nuevas que no se han usado en México, requiere de todo un procedimiento de salvaguarda ambiental que tampoco ha sido implementado en nuestro país “.
El impacto, subrayó, es respecto al recurso hídrico en su suficiencia y por el otro lado también en contaminación de mantos acuíferos.
Sostuvo que en los mantos acuíferos “podría haber contaminación por el mismo gas, cuando hay una manipulación con algunos problemas, pues el manto acuífero absorbe el hidrocarburo que tu estas sacando”.
Barrientos Alemán enfatizó que con la extracción de gas shale “las implicaciones serían para el sector agrícola y el consumo humano del agua”.
