Los explotados del 'oro verde'
Ellos son la mano de obra barata de una industria millonaria del "oro verde". Por sus manos pasan dos de los alimentos de mayor consumo entre los habitantes de México y de los Estados Unidos.
Cada semana generan millones de pesos de ganancia a los dueños, pero su sueldo diario es equiparable a cuatro salarios mínimos. Desde las 3:00 de la mañana salen de sus casas con la esperanza de que un contratista les permita cortar limón o aguacate.
Por 200 ó 300 pesos al día, estas personas trabajan hasta 10 horas seguidas, obtienen un salario a "destajo", sin seguro médico y sin el equipo adecuado para laborar en los huertos donde es común encontrarse alacranes, arañas o culebras.
Usan un par de tenis rotos o guaraches roídos y ropa desgastada. Algunos protegen sus manos con guantes, pero la mayoría sólo se envuelve un pedazo de tela.
ENFRENTAN EXTORSIONES
Desde hace cinco años Luis acude por las madrugadas a la glorieta a Lázaro Cárdenas, con la esperanza de ser contratado por los dueños de los ranchos donde se cultiva el limón.
"Aquí los únicos perdedores somos nosotros. Nos pagan poco y, por si fuera poco, Los Templarios nos piden una cuota por cada caja que llenemos", menciona Luis, padre de tres niños. No tiene estudios y ve en los campos la única oportunidad para llevar dinero a su casa.
Además de la mala paga y las extorsiones del crimen organizado, los cortadores sólo pueden trabajar tres días a la semana (lunes, miércoles y viernes), debido a que hay escasez de limón y la delincuencia organizada especula con el precio del cítrico para evitar que se malbarate su costo.
"Por donde quiera que uno lo vea, perdemos. Nos piden dinero `Los Templarios y no nos dejan trabajar toda la semana, porque un día es para cortar limón y otro es para empaquetar. Si uno lleva el limón a la empacadora diario, no lo reciben los criminales", menciona Rocío, una joven de 25 años, quien trabaja como cortadora para solventar los gastos de su familia.
LA TIENDA DE "RAYA"
Estanislao Beltrán, coordinador general de los grupos de autodefensas y productor de limón en Michoacán, reconoció que los salarios y las condiciones en que trabajan los cortadores son malas, por lo que es necesario revisar su situación para cambiar sus condiciones.
"Nosotros también debemos de compartir las ganancias con ellos, porque el cortador sin el productor no es nada, al igual que el productor no es nada sin el cortador. Todo debe de ser una cadena, todos debemos de alivianarnos en el momento en que mejoran los precios", comenta Estanislao, conocido como "Papá Pitufo", quien cuenta con 70 hectáreas para cultivar limón.
Para ser cortador del cítrico en Tierra Caliente lo único que se necesita es tener una red para cortar el producto y un costal para cargarlo mientras se lleva a las cajas.
No existe ningún documento laboral, por lo que los "patrones" no tienen ninguna responsabilidad en caso de que sus trabajadores sufran un accidente.
La mano de obra es reemplazada a diario, los cortadores cambian de campo recurrentemente. No les importa el "patrón", sino el trabajo.
Además de Estanislao Beltrán, dentro de la estructura de mando de los llamados grupos de autodefensas, que el 24 de febrero de 2013 se levantaron en armas para combatir los abusos y cuotas que "Los Caballeros Templarios" cobraban a la población, entre ellos a los productores de limón, también se encuentran líderes como Hipólito Mora o "El Comandante Cinco", quienes son dueños de hectáreas de cultivo del "oro verde".
"Hay muchas personas que tienen hijos, uno como sea, como uno no tiene responsabilidad no tiene muchos problemas, pero los compañeros que tienen hijos no la ven llegar. Unos tienen hasta cinco criaturas y con la paga no alcanza para nada. Ni enfermarse se puede, porque no hay seguro", relata Carlos, otro cortador.
Algunos huertos tienen cocinas en las que los cortadores pueden comer, pero cada alimento que piden es descontado de su sueldo, por lo que el trabajador recibe por su jornada sólo unos pesos.
"Uno puede comer ahí, pero la comida te la descuentan de tu sueldo. Imagínate, vienes por unos centavos, y al final del día acabas pagando por trabajar", narra Mauricio, quien a sus 20 años es padre de dos menores.
GANANCIAS MÍNIMAS
Para los cientos de cortadores de limón y aguacate en Michoacán, las ganancias que obtienen son mínimas comparadas con las de los dueños de los campos. Por cada caja de limón de 20 ó 22 kilos que llenan, obtienen una paga de entre 18 y 30 pesos.
El pago puede aumentar sólo si el precio del limón es bueno, pero eso depende de los dueños de los ranchos, si ellos lo consideran aumentan la paga, pero no existe ninguna obligación.
"Es cierto, algunos pagan más otros menos. Ahorita un cortador de limón donde hay bastante limón se gana cerca de mil pesos al día, pero ahorita porque es un precio bueno, lo estamos vendiendo a 20 ó 22 pesos el kilo", refiere Estanislao Beltrán.
Durante la semana pasada, en el Tianguis Limonero, de Apatzingán, el precio por kilo de este producto alcanzó los 21 pesos, en el mejor de los casos eso es lo que un cortador obtiene como paga por una caja de 22 kilos.
Para los cortadores de aguacate, esa realidad no es muy distinta. Por cada 50 ó 60 kilos del producto, obtienen una paga de 300 ó 400 pesos diarios.
"Pues es lamentable nuestra situación, pero no podemos hacer nada. Sabemos que en ocasiones los productores a veces no tienen muchas ganancias, pero hay ocasiones en que ellos obtienen mucho, y no nos dan un poco más", explica Rodrigo, otro de los cortadores del Valle de Apatzingán.
Aunque las ganancias de los dueños de las hectáreas en la región son muy altas comparadas con las de los trabajadores, argumentan que no pueden pagar un mejor sueldo, puesto que en cada cosecha deben de invertir en la siembra, en el cuidado de los árboles, en fertilizantes y plaguicidas. Además, afirman que los apoyos del gobierno son mínimos.
Desequilibrio
Por cada caja de limón que llenan, los cortadores obtienen una paga de entre 18 y 30 pesos, mientras que los "patrones" venden el kilo hasta en 21 pesos.
De acuerdo con dueños de campos, es difícil determinar cuántas personas laboran cortando limón y aguacate en Michoacán, ya que no existe un padrón o una asociación que lleve un registro.
Los cortadores no firman un contrato laboral y no tienen seguro médico, por lo que los empleadores no se hacen responsables por accidentes
En 2012, según datos del Gobierno del Estado, se sembraron 42 mil 941 hectáreas de limón, lo que llevó a la cosecha de 687 mil 56 toneladas.
