Pioquinto y Payán, quienes fueron víctimas de la delincuencia, señalan que el gremio estará en alerta ante cualquier llamado de emergencia. (Archivo)
Empresarios de Chilpancingo advirtieron al crimen organizado que no permitirán más extorsiones ni plagios. "Si hay un secuestro más vamos a dar una respuesta contundente, vamos a actuar con mucha energía y la respuesta será proporcional al daño que nos causen", dijeron.
La tarde de este miércoles, Pioquinto Damián Huato, ex dirigente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) Chilpancingo, ofreció una conferencia de prensa junto con el empresario Rigoberto Payán Mejía, quien reapareció por primera vez después del secuestró que sufrió.
Pioquinto Damían, quien fue víctima de un atentado, afirmó que tienen ubicados a los grupos delincuenciales, por lo que les advirtió: "no les vamos a permitir ni un secuestro más, ni cobros de piso".
"Les decimos a los extorsionadores, a los que cobran derecho de piso, que lo piensen muy bien, que se dediquen a otras actividades, porque los que faltan por agarrar (detener), nosotros los vamos a agarrar y los vamos a entregar directamente a la autoridad correspondiente", agregó.
También dio a conocer que a partir de hoy, los empresarios de la capital guerrerense estarán en alerta ante cualquier llamado que les haga algún miembro de su gremio; "porque hay un grupo de vivales que ya agarraron como tontos a algunos empresarios, ahora eso se acabó, ante cualquier llamado acudiremos para detener a los extorsionadores".
Sin embargo, descartó que los empresarios estén armados o que cuenten con la integración de algún comando para combatir a los grupos delincuenciales, "pero ante cualquier llamado de auxilio, les vamos a caer de inmediato a quienes sigan secuestrando o cobrando derecho de piso".
Damián Huato descartó que estén pensando en formar una policía comunitaria, porque la seguridad a que tienen derecho se las da el pago de sus impuestos, el cumplimiento de sus obligaciones, pero que tienen el derecho también de solicitar al gobierno que cada quien aporte lo necesario "para brindarnos seguridad".
Rigoberto Payán, por su parte, agradeció a las policías Estatal y Federal el rescate de que fue objeto, pero pidió que se agilice la aplicación de la justicia en su caso.
Además, dejó que la "justicia divina" sea quien castigue a quienes lo privaron de su libertad.
Payán Mejía, quien fue plagiado el pasado 11 de junio y liberado seis días después, admitió que el secuestro le dejó secuelas pero que trata de recuperarse.
Señaló que es necesario que los empresarios y la sociedad se unan para frenar la ola de violencia e inseguridad que mantiene a Chilpancingo "ahorcado", "para que cuando los delincuentes estén asaltando, quieran plagiar o extorsionar, sepan que la sociedad va a hacer todo para evitarlo".
Payán exigió a la Procuraduría General de Justicia del Estado detener al resto de los delincuentes que lo plagiaron y lo mantuvieron en cautiverio seis días.
Sin embargo, a pesar de las exigencias de los empresarios, anoche hubo una jornada violenta en Chilpancingo y Acapulco. Casi a medianoche, individuos armados asesinaron a un taxista a balazos y a otro en la colonia Sección Séptima, lo que provocó movilización policiaca.
